Es difícil saber si a partir de ahora los vecinos de Cabanillas del Campo tendrán motivos para sentirse más seguros. Lo que sí han perdido es parte de su intimidad, al menos al circular al volante por la localidad. Al igual que ocurre en otras poblaciones, incluida la capital de la provincia, un sistema automática graba todas las matrículas que acceden al casco urbano o salen de él.
El sistema de videovigilancia, como ha confirmado desde el Ayuntamiento con indisimulada satisfacción, ya está en marcha. Se trata sólo de una primera fase, pero hay ya 20 cámaras instaladas y operativas, ubicadas en «puntos estratégicos» del término municipal. Aseguran que el visionado de las imágenes y del registro de matrícula queda limitado a la Policía Local y, en caso necesario, a la Guardia Civil o a los jueces.
Los puntos de esta fiscalización continua de los movimientos de las personas son localizables por cualquiera con un poco de paciencia ya que al pie de las cámaras, tal y como marca la legislación, se han colocado letreros que alertan de la presencia del dispositivo.
A lo que aspiran los responsables municipales es a que, si se produce un robo o cualquier otro delito en la localidad, los cuerpos de seguridad puedan revisar las imágenes de vídeo captadas por estas cámaras en las horas anteriores y posteriores al suceso, lo que se supone puede ayudar a localizar vehículos sospechosos, implicados en tales sucesos.
Semáforos inteligentes
Para lo que aún faltan días es para la finalización de los trabajos de modernización de los dos semáforos que el Ayuntamiento ya instaló sobre la carretera CM-1007 a finales del año 2018, utilizados por los peatones de los barrios del Soto y del Mirador hacia la zona centro. Se trata en concreto de los cruces sobre la carretera que unen la calle Benalaque con la calle Lope de Vega; y la calle San Sebastián con Francisco de Quevedo.
En cuanto finalicen los trabajos de instalación, ya iniciados, en unos pocos días estos semáforos pasarán a ser de los considerados «inteligentes», dotados de tecnología “smartvideo”. La iniciativa incluye la instalación de nueva señalización vertical luminosa, y de un balizamiento horizontal luminoso con “captafaros”.
El sistema funciona a través de unas videocámaras que detectan la presencia de peatones en la acera previa al paso de cebra. Con un software especial, estas cámaras mandan la orden de iluminar automáticamente las señales verticales cuando el peatón cruza, así como las luminarias-captafaros ubicadas en el suelo de la calzada, unos dispositivos muy visibles para los conductores, especialmente en horario nocturno. Además, estas cámaras pueden también integrarse si se desea en el nuevo sistema de seguridad de las entradas y salidas de la localidad.
La previsión es que los nuevos semáforos también entren en funcionamiento antes del comienzo de las Fiestas, el próximo martes.
