¿Puede ser un precedente para otros casos, como el de Guadalajara? A día de hoy, es muy arriesgado plantearlo así, pero lo cierto es que lo ocurrido en las últimas horas y el colofón que acaba de producirse en la mañana del jueves no permite descartar que eso llegue a repetirse de manera más generalizada en los consistorios de España donde gobiernan juntos PP y Vox.
En el caso de la capital alcarreña, después de consolidarse el abandono de los de Santiago Abascal de los gobiernos regionales, tanto Víctor Morejón (Vox) como Alfonso Esteban (PP) escenifican con estudiada frecuencia comparecencias públicas ante los periodistas, para glosar su entendimiento en asuntos de política general y poderse fotografiar juntos.

El caso de Ciudad Real
Lo concreto es que en el Ayuntamiento de Ciudad Real acaba de anunciarse oficialmente la retirada de competencias a los concejales de Vox en ese consistorio, en respuesta a la suspensión del acuerdo de Gobierno por el hasta ahora teniente de Alcalde y concejal de Seguridad, Ricardo Chamorro.
Tras la ruptura del acuerdo, el Grupo Municipal Popular queda al frente de un Ejecutivo en minoría, sostenido por sus 11 concejales, siendo 13 la cifra necesaria para contar con la mayoría absoluta.
Sin embargo, el reparto de ediles en el pleno permiten a los ‘populares’ mantenerse al frente del Ejecutivo local, ya que tan solo una acción conjunta de los otros tres grupos municipales amenazaría su Gobierno.
En las elecciones de 2023, el PSOE obtuvo 9 concejales, mientras que Vox obtuvo 4 y Ciudadanos, 1.
A través de un comunicado, el equipo de Gobierno encabezado por el alcalde, Francisco Cañizares, da por concluido el acuerdo de coalición ante «las consecuencias que ya ha tenido en el funcionamiento y desarrollo de las distintas áreas del Ayuntamiento, con dejación de funciones, incomparecencias de miembros de grupo VOX a organismos y votos en contra de acuerdos del equipo de gobierno, como la petición de la subvención de fondos FEDER, la mayor de la historia pedida por el Ayuntamiento de Ciudad Real; y no haber aceptado la petición de rectificación que ofreció ayer el Alcalde en comparecencia pública».
«No es posible mantener por más tiempo la situación provocada por Vox y que va en contra del acuerdo firmado que tenía como objetivo la mayor estabilidad del ejercicio de la labor del gobierno. La labor de gobierno es incompatible con las amenazas y los chantajes que sólo tienen como objeto el enfrentamiento y son fruto de instrucciones ajenas al ámbito municipal», apunta el comunicado.
Asimismo, argumenta que «la decisión comunicada públicamente por Ricardo Chamorro, de manera unilateral, ha dañado ya la acción del gobierno municipal y no se puede mantener por más tiempo».
La intrahistoria del conflicto en Ciudad Real
El conflicto entre los hasta ahora socios de Gobierno local se desató el pasado martes, 25 de febrero, cuando el hasta ahora teniente de Alcalde, Ricardo Chamorro, anunció que el pacto de gobierno quedaba «en suspenso» tras una polémica suscitada a cuenta del reparto de un cuadernillo para colorear entregado por el Consistorio.
El cuadernillo, bajo el título ‘Mandalas con valores’, abordaba la diversidad en los ámbitos familiares, siendo acusados por Chamorro de adoctrinamiento.
Durante el pasado fin de semana, Ricardo Chamorro instó a la «retirada» de estos cuadernillos, asegurando haber recabado el sí de la parte del PP en el Gobierno para ello, algo desmentido por fuentes municipales a Europa Press.
A partir de ese malentendido, era la propia concejal de Educación, María José Escobedo, quien aseguraba a preguntas de los medios que «no se va a retirar ningún cuadernillo». «Solamente quiero transmitir que para conseguir y lograr una ciudad realmente inclusiva tenemos que basarnos en el respeto y no se puede conseguir el respeto si no respetamos la dignidad de cada individuo. Estos cuadernillos solamente hablan de valores, de corresponsabilidad, y no se van a retirar», respondía la titular municipal de Educación.
Tras este movimiento, era Ricardo Chamorro quien volvía a la carga en un audio difundido a los medios donde aseguraba como respuesta que con este movimiento la edil «se mete en competencias de otra Concejalía, la de Familia y Mayores», ostentada por Vox; a lo que ha sumado que además «intenta adoctrinar a los niños con un cuaderno de colorear donde habla de la diversidad de las familias en un claro ejemplo de doctrina ideológica de género en relación a los menores».