El Mercadillo del Libro de Segunda Mano de Fuentenovilla se ha convertido ya en un clásico cultural del mes de junio en La Alcarria. Cada año se celebra el último sábado de este mes, lo que lo ha convertido en una cita ineludible no sólo para los fuentenovilleros, sino también para muchos otros lectores de localidades cercanas como Albares, Mondéjar, Escariche o Zorita, que conocen y aprecian la iniciativa.
Este año, se han puesto a la venta más de 1.000 libros, fruto de donaciones de particulares e instituciones a la Biblioteca Blas de Salcedo. “Las donaciones de libros que ya tenemos cubiertos entre nuestros fondos, o bien que, por lo que sea, no entran en el plan de contenidos de la Biblioteca, son las que destinamos al Mercadillos del Libro de Segunda Mano”, explica José Vicente Monge, bibliotecario. Con los fondos recaudados por esta iniciativa, se adquieren nuevos libros o DVDs para la Biblioteca, para lo que “incluso pedimos que los socios hagan desideratas para manifestarnos sus preferencias”, explica Monge. Así, la Biblioteca se acerca más aún a lo que los socios quieren que sea.
La organización del Mercadillo del Libro Solidario es un trabajo en equipo al que se suman, de manera altruista, los voluntarios de la Biblioteca. Este año, han sido catorce las personas que han ayudado a montar, a vender y a todo lo que ha sido necesario, si bien en los momentos puntuales de montaje y desmontaje han sido muchos más los vecinos que colaboraban con el trabajo.
En la jornada de mañana, hubo taller infantil de manualidades, en el que han participado 18 niños y niñas de Fuentenovilla. Después y mientras el calor lo permitió, la Plaza Mayor, presidida por La Picota, se animó con la presencia de numerosos aficionados a la lectura que curiosearon y compraron. Y lo mismo ocurría por la tarde, hasta completar unas ventas estimadas de algo más de 400 libros, a diferentes precios.
A partir de las ocho y media, ya a la sombra del sol radiante del día, los niños del Grupo de Baile de Fuentenovilla llevaron a cabo una actuación sobre el escenario de la Plaza, bailando dos canciones, una por cada grupo de edad, ante un público entregado, y mostrando con ello sus progresos a lo largo del año. Los dirige María Murillo, que también era voluntaria de la Biblioteca. Después de los aplausos, cada uno recibió su diploma acreditativo del curso.
Para terminar la VII Edición del Mercadillo del Libro de Segunda Mano, el teatro de títeres del grupo Titirisueños le ponía punto final cultural a la jornada, antes de la rifa final, que le dio el último empujón a la recaudación. Terminando la VII edición, José Vicente Monge hacía balance: “estamos muy satisfechos con esta jornada tan bonita, que también pretende formar comunidad en torno a la cultura, favoreciendo un ambiente cultural y de amistad. Doy las gracias a los voluntarios y a los donantes, y también a los vecinos que se acercan a conocer y a participar en ella”.
Uno de los voluntarios ha sido Jonatan Cámara, concejal de Cultura del Ayuntamiento de Fuentenovilla. “La gente ha acudido y ha colaborado con esta iniciativa tan bonita cuyo principal objetivo es el de recabar fondos para ampliar nuestra Biblioteca. Además, ha sido estupendo ver bailar a los niños, que son el futuro de Fuentenovilla. Por último, quiero dar las gracias a los voluntarios que han hecho que también esta VII edición haya salido adelante de manera brillante”, decía ayer.
La Biblioteca Blas de Salcedo tiene ahora más de 7.500 fondos entre libros y DVDs y 636 socios. “Es, sin duda, el eje cultural de Fuentenovilla. Cada día, de invierno o verano, hay una actividad de dinamización, una clase o una idea nueva que llevar a la práctica para animar a leer a los fuentenovilleros. Creo que es necesario reconocer su trabajo a nuestro bibliotecario, José Vicente Monge, así como su capacidad de involucrar a la sociedad local en torno a la cultura”, afirma Montserrat Rivas, alcaldesa de Fuentenovilla.