La primera detención relacionada con el alcohol al volante la última semana en Guadalajara tuvo lugar el miércoles, a las 20 horas, en la calle Julián Besteiro, como consecuencia de un accidente de tráfico ocurrido entre un turismo y una bicicleta, en el que resultó herido leve el ciclista.
En la prueba efectuada al conductor del turismo, se obtuvo un resultado positivo de 0,59 miligramos de alcohol por litro de aire espirado. El conductor, de 35 años y vecino de Horche, fue detenido por un delito contra la seguridad vial. El accidente se produjo cuando el turismo se incorporó a la circulación sin respetar una señal de detención obligatoria.
El viernes, a las 2,47 horas, una patrulla de servicio por la calle Clara Campoamor observa a un vehículo cuando efectúa una maniobra de marcha atrás antirreglamentaria, girando bruscamente a la izquierda para continuar por la calle Eulalia Abaitua, a velocidad inadecuada. Dicho vehículo fue interceptado en la avenida de la Salinera. Ante los síntomas de intoxicación etílica que presenta el conductor, se realizan las pruebas con un resultado positivo de 0,47 miligramos de alcohol por litro de aire espirado. El conductor, de 25 años y vecino de la capital, fue detenido por un delito contra la seguridad vial. Consta otra detención por un delito similar en el año 2016.
El viernes, a las 22,05 horas, en la intersección de la carretera CM-1007 con Julián Besteiro, un conductor pierde el control de su vehículo, colisionando contra una isleta de canalización. Realizadas las pruebas de alcoholemia, se obtiene un resultado positivo de 0,59 miligramos de alcohol por litro de aire espirado. El conductor fue detenido por un delito contra la seguridad vial. Tiene 64 años y es vecino de Guadalajara.
El domingo, a las 00,35 horas, en la calle Madrid se registra la cuarta detención. En este caso, un turismo colisionó contra otro que estaba debidamente estacionado en dicha calle. Efectuadas las pruebas de alcoholemia, se obtiene un resultado positivo de 0,58 miligramos de alcohol por litro de aire espirado. Se procede a la detención de este conductor, de 52 años y vecino de la provincia, por un delito contra la seguridad vial.
La quinta detención se produjo a las 23,15 horas del domingo, al observar una patrulla policial a un vehículo que les precede por la avda de Castilla, circulando de forma anómala y obstaculizando la circulación. Efectuadas las pruebas, el conductor, de 30 años y vecino de la capital, dio positivo con 1,37 miligramos de alcohol por litro de aire espirado. Según los registros de la Policía Local, se trata de la tasa de alcoholemia más alta de lo que va de año 2019. Este mismo conductor fue detenido en 2009 por un delito similar.