Con mejor tiempo que el de este pasado sábado, otro 12 de octubre fue un día muy especial para la ciudad de Guadalajara y toda su provincia, pues fue el elegido para el primer concierto de la Banda de Música de la Diputación Provincial de Guadalajara.
Aquel 12 de octubre de 1959 los tendidos del coso de Las Cruces se llenaron como sólo lo hacen en las grandes ocasiones. Han pasado 65 años y no consta que haya habido un recuerdo oficial de esta efeméride.
Sus componentes tenían en común haber sido niños de la Casa de Misericordia, adiestrados para la música bajo la batuta del maestro Pinilla.
Después sería don José Simón el que tomara las riendas, enseñando con solvencia a esos niños que posteriormente fueron integrantes de la Banda. Un largo recorrido de esfuerzo y dedicación durante muchos años que llevaron el nombre de Guadalajara por todos los lugares por donde actuaron, logrando innumerables éxitos y grabando cinco discos que quedarán para la historia cultural de Guadalajara.
Músicos que se dejaron la piel, en largas horas de ensayo y actuaciones en la capital y por los pueblos de la provincia. Durante muchos años sin cobrar y con el bocadillo en el bolsillo. Muchos ya han fallecido pero otros, afortunadamente, siguen vivos y gozando de buena memoria y recordando lo que fue aquella fecha tan señalada, muy orgullosos de haber pertenecido a la Banda Provincial de Música durante más de 50 años.
Para recordar esa larga trayectoria permanece incansable María Jesús Calvo, esposa de uno de los primeros integrantes y madre de músicos de la siguiente generación, conocidos entonces por su labor en la Banda Provincial y también fuera de ella, desde Klandestinos.
«No dudo de la profesionalidad de los músicos que componen la banda actual junto con su directora, Nuria Matamala –apunta María Jesús Calvo– pero lo que sí puedo decir es que desde que la antigua banda se terminó, por mala gestión de la señora Guarinos, por entonces presidenta de la Diputación, Guadalajara se ha quedado muda», lamenta con rotundidad al tiempo que desempolva las viejas fotografías que acompañan estas líneas.
