El concejal del Grupo Municipal Popular en el Ayuntamiento de Guadalajara José Luis Alguacil ha la oposición total del PP al proyecto de modificación de la ordenanza fiscal reguladora del servicio de recogida de basuras que «pretende aprobar el gobierno de Alberto Rojo en Guadalajara».
Alguacil ha explicado que con esta modificación el gobierno de Rojo «cargará sobre los vecinos de la ciudad la subida de la tasa de basuras con el consiguiente incremento para los bolsillos de los ciudadanos».
En concreto, con la enmienda a la totalidad el Grupo Popular pide «la retirada de esta modificación de la ordenanza fiscal», que se proceda a la actualización del estudio de costes de la concesión del contrato de limpieza viaria y recogida de residuos sólidos, de tal forma que se computen los ahorros derivados de la eliminación de las «islas de contenedores soterrados» y se computen tales ahorros a la implantación del quinto contenedor, sin que tales costes repercutan en la economía de los ciudadanos.
En este sentido, el concejal del Grupo Popular ha afirmado que «Rojo y su gobierno han fracasado» puesto que «en el año 2020 el propio alcalde dijo públicamente que Guadalajara estaba sucia, pedía disculpas a los vecinos y decía que quería una ciudad más limpia y, para ello, iba a poner todas las medidas para intentar solucionar esta situación tan grave que existía en las calles de nuestra ciudad».
«Guadalajara está más sucia que nunca»
A juicio de Alguacil, «dos años después podemos decir que el alcalde y su equipo de gobierno han fracasado porque la ciudad está más sucia que nunca». En rueda de prensa, Alguacil ha detallado también que «las calles del casco histórico se encuentran llenas de excrementos de aves y caninos, así como de desperdicios, añadiendo la situación de insalubridad que esto genera».
Además, «las calles de los nuevos desarrollos son un auténtico estercolero donde los servicios de limpieza no pasan ni una sola vez a la semana, por no hablar del estado de algunas instalaciones deportivas al aire libre con gran cantidad de desperdicios que las hace impracticables».
Ante esta situación, en la que el gobierno de Alberto Rojo «no ha tomado ni una sola medida como prometió, nos encontramos con la sorpresa la semana pasada que se nos traía a comisión una ampliación del servicio que se quiere realizar mediante la modificación de la ordenanza fiscal número 10, que es la reguladora del servicio de basuras».
El PP subraya que dentro de esta ordenanza se recoge que este nuevo servicio de recogida de basuras del quinto contenedor va a suponer un sobrecoste a la empresa de 648.564 euros. «Y el equipo de gobierno nos dice que este coste tiene que recaer íntegramente en los ciudadanos de Guadalajara».
El Grupo Popular está en contra de esta decisión y de esta nueva ordenanza que «va a suponer una nueva subida de impuestos para nuestros ciudadanos dentro de los tiempos tan complicados que estamos viviendo».
«Mientras se pide la bajada de impuestos, de luz, agua, gasolina, este ayuntamiento nos sube los impuestos que va a suponer, más o menos, un euro más por recibo y trimestre para los vecinos, y todo ello mientras Guadalajara está sucia, está cada vez más sucia, es una ciudad destartalada y sin ningún cariño por ella», ha apuntado añadiendo que «este equipo de gobierno está paralizado y demuestra, una vez más, una gran incapacidad para gobernar este ayuntamiento».
El quinto contenedor, propuesto en su día por el PP
El Ayuntamiento ha anunciado la intención de colocar el quinto contenedor o fracción orgánica, sobre lo cual José Luis Alguacil ha querido recordar que «fue el anterior equipo de gobierno el que apostó por este contenedor y convirtió a Guadalajara en una ciudad pionera de la fracción orgánica: un proyecto que comenzó en enero de 2018 pidiendo incluso la subvención necesaria para la implantación de este quinto contenedor».
«Esta instalación va a suponer un gasto de 2,6 millones de euros -de los que 1.166.000 euros corresponden a la citada subvención- que va a consistir en la compra, ya realizada, de tres camiones recolectores de carga lateral, un camión de carga trasera de 423 nuevos contenedores».
Contenedores tirados a la basura
A esto se suma el anuncio de «retirar 53 islas de contenedores soterrados de nuestra ciudad lo que significará, por un lado, tirar una inversión de más de dos años a la basura y, por otro, un ahorro para la empresa adjudicataria ya que de sobra es conocido que la fórmula de contenedores en superficie es más económica por la reducción de costes tanto en personal como en mantenimiento».
Todo ello demuestra que «la empresa adjudicataria está teniendo un gran ahorro de costes y no está realizando lo comprometido en el contrato», ha añadido.