El consejero de Sanidad de Castilla-La Mancha acaba de confirmar, en una rueda de prensa emitida por streaming desde Toledo, que la región está viviendo un «pico» en la extensión del coronavirus COVID-19. Concretamente, en las últimas horas, las que van del martes al miércoles, se ha pasado de 39 a 71 positivos en la región. El único consuelo de las cifras es que de ese total, dos son pacientes que ya han sido de alta, una vez curados.
En Guadalajara son ya 29 los casos (frente a los 22 de la víspera), de los cuales sólo está en UVI uno de ellos. Le siguen en número los 22 casos de Ciudad Real, los 12 de Toledo y los 8 de Albacete. Cuenca permanece sin casos registrados. Hospitalizados en Guadalajara hay 10 pacientes, una cifra inferior a los 15 de Ciudad real, pero mayor que los 5 de Toledo o los 3 de Albacete
Los datos, según Fernández, «nos permiten seguir con la actividad asistencial intacta», lo que implica que no se variará la programación de los 131 quirófanos de los hospitales de Castilla-La Mancha. La vecina Comunidad de Madrid ha tomado una decisión en sentido contrario.
«Los datos no determinan tomar ninguna decisión a mayores» ni en el Corredor del Henares ni en La Sagra, a pesar de su cercanía con Madrid, según el consejero.
Hasta el momento, se han hecho 300 pruebas en las cinco provincias a personas sospechosas de estas afectadas por el virus.