El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha avanzado que en la región se da por terminado el curso escolar de forma presencial.
Así lo ha confirmado en rueda de prensa desde Puertollano, donde ha aprovechado para agradecer el trabajo de los docentes durante toda la crisis sanitaria para mantener el ritmo de las clases.
«No crean que es fácil, se ha precipitado todo, en todo el mundo», ha señalado, apuntando que ahora toca incentivar la inversión en el proceso de digitalización de las aulas.
La esperanza, en septiembre
Ahora se prepara un protocolo específico que, sobre todo en los cursos que implican pasar un periodo educativo, «se pueda de forma voluntaria, programada y con cita previa» asistir a tutorías personalizadas. Además, abre la puerta a que se pueda regular la posibilidad de que los alumnos puedan reencontrarse «y verse, saludarse y compartir experiencias con la mirada» antes de dar por acabado el curso.
La Consejería de Educación, ha dicho, irá trabajando con agentes sociales para «garantizar la total seguridad para familias, docentes y personal de centros educativos» con la esperanza de que en septiembre «la cosa vaya mejor» pero teniendo en cuenta la precaución necesaria.
El curso «se tiene que reinaugurar en septiembre», y habrá que analizar «todas las opciones» dependiendo de la casuística de cada territorio.
«Lo importante es que no haya brecha educativa, que este tiempo se pueda usar para la consulta y mejora de preparación de alumnos con más dificultades tras un esfuerzo tremendo. Interesa y mucho que esto se pueda regular de una forma amable, sensata y segura», ha apuntado.
