Este martes no ha habido ningún espectáculo dantesco en el centro de Guadalajara sino una hilera formada por unas cuantas decenas de personas, esperando a distancia prudente unas de otras el momento de conseguir sus entradas para ver a los Reyes Magos. Nada que ver con la desesperación de la víspera.
La hilera alcanzaba a las cinco de la tarde del martes hasta el comienzo de la Plaza del Jardinillo. Ese era el punto en el que personal del departamento de Protocolo repartía a los que iban llegando la gran novedad de esta segunda jornada de distribución de invitaciones: unos papelitos numerados, un auténtico «salvoconducto» para presentarse en la taquilla en el horario establecido, hasta las ocho y media de la tarde.
El poseedor de ese vale tiene la opción de mantenerse en la fila o volver a lo largo de la tarde. Sólo se repartirán en este 15 de diciembre un número adecuado de vales, para garantizar que la gestión no se demorará en exceso.
Hay ganas de pasar página cuanto antes a lo vivido el lunes, cuando hubo quienes hicieron guardia desde horas antes del momento anunciado para abrir la ventanilla… y quienes permanecieron hasta bien entrada la noche para conseguir sus tiques, a veces bajo los paraguas.
Cita previa por Internet
La novedad de hoy no será la única ni la última. Para este miércoles está previsto que se abra una suerte de cita previa, a través de Internet, con lo que se prevé ya quede totalmente normalizada la asignación de unas entradas gratuitas que han levantado una enorme expectación. Demasiada incluso, según lo visto y padecido en la primera jornada.