Seis meses y un millón de euros ha costado la reforma de las plazas de San Esteban y Prim, cuya limpieza y puesta a punto se ultimaba minutos antes del acto oficial, como han podido conocer puntualmente los lectores de LA CRÓNICA.
La reforma ha sido inaugurada este lunes por la alcaldesa, Ana Guarinos, junto con la delegada del Gobierno, Milagros Tolón, que ha sido invitada al tener en cuenta que la inversión llevada a cabo proviene, en una parte importante, de los Fondos Europeos Next Generation (440.000 euros) frente a unos 690.000 al Ayuntamiento.
La consejera de Igualdad Sara Simón, que ya no es concejal, y el diputado socialista Alberto Rojo, que ya no es alcalde pero sí concejal, han tenido una notoria presencia este lunes en las reformadas plazas, obras que divergen bastante de lo que durante su mandato se pretendía.
Las obras se recepcionaron el pasado, jueves 18 de julio. Según Guarinos «han merecido la pena».
La alcaldesa esgrime que estas eran unas plazas con «una suma de pequeños rincones, con muchos obstáculos» y que ahora son zonas más accesibles y cómodas.
El archivo de este diario nos ayuda a recordar cómo eran ambas plazas antes de la inversión realizada:
La alcaldesa ha destacado que se han incorporado juegos infantiles, espacios de sombra con pérgolas y un arbolado que «aunque aún tiene que crecer».
Por qué se quitaron los colores que querían Simón y Rojo
Guarinos ha recordado que para la realización de estas obras se ha requerido llevar a cabo algunas modificaciones en el proyecto inicialmente previsto, ya que las tonalidades previstas inicialmente hubo que cambiarlas porque la propia Consejería de Educación y Cultura emitió un informe negativo en el que remarcaba que esos tonos en origen no eran acordes ni con el entorno urbano ni con los edificios históricos que hay en las inmediaciones, como son el Palacio de los Condes de Medina y la antigua iglesia de San Esteban.
«Estamos en un entorno medieval que había que respetar», ha señalado Guarinos, recordando que ello hizo necesaria la modificación del proyecto, ahora con tonos marrones. Además, en el caso concreto de la Plaza Prim, se han sustituido los contenedores y se ha nivelado también el suelo, salvando el desnivel que había y haciéndola «mucho más cómoda para todos».
«En todo momento la hostelería ha tenido terrazas», dice Guarinos
En su intervención, la alcaldesa también ha señalado que si bien los hosteleros han podido poner en todo momento sus terrazas pese a las obras, ya que no ha habido problemas para que las sacaran a la calle, sí ha reconocido que, una vez redistribuidos los espacios, será cuestión solo de «ampliar lo que había». «En todo momento la hostelería ha tenido terrazas», ha abundado.
Las obras que arrancaban el pasado mes de enero y cuya finalización ha concluido en el plazo previsto por el Ayuntamiento. «Dijimos que estarían antes de las ferias y compromiso cumplido», ha subrayado la alcaldesa, insistiendo en que se ha cumplido el compromiso para que se pudiera «salvar» la temporada de fiestas de la hostelería y también los vermús de Navidad.
«Es un momento importante» para la ciudad», ha insistido, esperando que siga entrando dinero proveniente de los fondos europeos «porque la capital lo necesita», haciendo hincapié en que la inversión se haya realizado en el casco histórico, en una zona que «necesita una mayor inversión y más actuaciones ya que es el corazón de la capital y hay que dotarla de vida y actividad».
