Durante varios días, esos dos alcarreños fueron involuntarios protagonistas de la actualidad informativa nacional, entre octubre y noviembre, tras conocerse sus positivos en sendos controles. Su caso cruzó fronteras. La alarma saltó cuando primero uno y luego el otro dieron positivo como contagios humanos de gripe aviar. Ambos trabajaban en la granja donde se había declarado un brote, en Fontanar, que sólo pudo ser atajado sacrificando 500.000 gallinas. Estos operarios no presentaban síntomas, pero la posibilidad de que el virus saltara a los humanos y que ellos fueran la prueba fehaciente fue motivo de intensa preocupación.
Meses después, un informe del Ministerio de Sanidad recupera ese caso y aquellos dos positivos, consecuencia de otros tantos exudados nasofaríngeos. Uno se realizó el 23 de septiembre y el otro, el 13 de octubre de 2022. La noticia aún tardaría en trascender.
Ahora, el ministerio puntualiza que «la ausencia de síntomas y la baja carga viral en ambos casos, junto con los resultados negativos de las pruebas serológicas en el primero de ellos, sugieren que se trató de contaminaciones ambientales en el contexto de elevada presencia del virus en la explotación afectada«.
No obstante, dado el «potencial pandémico» de los virus de la gripe aviar, Sanidad justifica que «se tomaron las medidas de salud pública oportunas para evitar la posible transmisión a otras personas».
Andando el tiempo, ya no sólo las gallinas las que cumplen el papel de vector para la transmisión del H5N1, que es el virus que nos ocupa y que aún preocupa. Desde el mismo 13 de octubre de 2022 está confirmado un foco en una granja de visones en La Coruña, que produjo una «elevada mortalidad entre los animales». Llevadas a cabo las medidas de control y detección precoz en torno a dicho foco, no se produjo ninguna detección entre los trabajadores expuestos. En numerosos países por todo el mundo la gripe aviar se ha convertido en un problema, sanitario y económico, de primer orden.
Revisión de protocolos
La Comisión de Salud Pública ha aprobado este jueves, 2 de enero de 2023, la actualización del documento ‘Prevención, detección precoz y control de gripe aviar en personas expuestas a focos en aves y visones’, intentando sacar enseñanzas tras el aumento de los casos que se ha producido durante 2022.
El texto se ha publicado este viernes en la página web del Ministerio de Sanidad. Amplía los cribados en aquellas personas que hayan tenido contacto con el virus de la gripe aviar pero que sean asintomáticas, con el objetivo de mejorar el control.
En España, las infecciones por el virus de la gripe aviar están consideradas como enfermedad de declaración obligatoria tanto en el ámbito de la sanidad animal, como en humanos.
Debido a su riesgo potencial de originar pandemias, la gripe de origen zoonótico en humanos se vigila en España mediante distintos protocolos que van más allá de los sistemas de vigilancia de la gripe estacional.
Según la Evaluación Rápida de Riesgo de Sanidad, publicada el jueves, en España en la temporada 2021-2022 se ha introducido el virus de la gripe aviar (IAAP) del subtipo A(H5N1), «provocando focos en aves silvestres y explotaciones avícolas».
El Ministerio advierte de que tanto en Europa como en América del Norte «esta ha sido la temporada con mayor número de focos registrados hasta la fecha». Precisamente el aumento del riesgo de aparición de focos de IAAP en aves en España ha motivado la actualización del protocolo para la prevención y detección precoz de posibles casos en personas expuestas.
La transmisión de las aves a los humanos es un fenómeno «poco frecuente». Según Sanidad, esto se demuestra debido al «escaso número de casos detectados en humanos a pesar de todos los focos detectados en aves durante la última temporada, y la probabilidad de transmisión persona a persona es todavía menor».
«Sin embargo, es muy importante prevenir la aparición de casos humanos por la posibilidad de que el virus de la gripe aviar pueda reorganizarse con otros virus de la gripe estacional o adaptarse al ser humano de tal manera que mejore su capacidad de trasmisión entre personas. Además, aunque infrecuentes, los casos en humanos pueden llegar a ser muy graves», ha advertido el Ministerio.
Por otro lado, la temporada 2021-2022 ha sido también la primera en la que se ha detectado un brote de gripe aviar en una granja de visones en España.
El peligro de las granjas de visones
Como explica Sanidad, los visones son susceptibles tanto a la gripe aviar como a los virus estacionales que afectan a los seres humanos, por lo que un brote en esta especie «podría suponer un riesgo de adaptación muy eficaz de los virus aviares a los mamíferos o se podría producir un reordenamiento entre virus aviares y virus humanos».
Por estos motivos, el protocolo se ha actualizado también para establecer las indicaciones y las condiciones idóneas para la toma de muestras en personas expuestas a brotes de gripe aviar en explotaciones ganaderas, tanto de aves como de visones.
En concreto, el protocolo actualizado recoge que se deberá facilitar, en un plazo máximo de 72 horas desde que se notifica un foco de gripe aviar, una lista con todas las personas que hayan estado en contacto con esos animales, a los que se realizará una vigilancia por si tienen síntomas o incluso pruebas PCR.
Sanidad añade que, debido al «alto volumen» de aerosoles que pueden generarse en estos brotes y en las tareas de limpieza y desinfección derivadas de ellos, se considerarán expuestas las personas relacionadas con el foco, incluyendo trabajadores de la explotación y personas implicadas en las tareas de control, «independientemente de la utilización de los EPI durante la exposición.
Más información:
- Brote de gripe aviar en Fontanar, con 600.000 gallinas sacrificadas en una granja
- Segundo foco de gripe aviar, ahora en Guadalajara: 150.000 gallinas sacrificadas
- ¿Qué se ha hecho con las 750.000 gallinas sacrificadas ya en Guadalajara por la gripe aviar?
- Un trabajador de la granja de Fontanar, contagiado por gripe aviar
- Hay un segundo caso de gripe aviar en los trabajadores de Fontanar