Los hay que babean por las esquinas, incluso en época de coronavirus. Para esos y para algunos más es de interés la nueva normativa de Castilla-La Mancha, que introduce la prohibición del uso compartido de dispositivos de inhalación de tabaco, pipas de agua, cachimbas o asimilados en los locales de entretenimiento, ocio, hostelería y restauración, discotecas y en cualquier otro tipo de establecimiento abierto al público.
Dicho queda. Ahora, que se cumpla.