Agentes de la Policía Nacional han detenido a un conocido youtuber, que se grabó conduciendo a 233 kilómetros por hora por un vía de servicio de la carretera M-45 de Madrid, limitada a 80 kilómetros por hora. La grabación fue subida a Youtube el 25 de septiembre. Dura 20 minutos repasa con detalle, y con bastante sentido del humor, las características del coche de la prueba. Sus reportajes tienen audiencias millonarias.
El detenido publicó el vídeo en su canal, donde cuenta con más de dos millones de seguidores registrados. El coche en esta ocasión era un Lamborghini Huracan. El autor de estos vídeos, muy populares, no suele mostrar el rostro en sus vídeos. El vídeo en cuestión fue subido a Youtube el 25 de septiembre y en el mismo el arrestado prueba un coche de alta gama prestado por un conocido que vive en Valencia.
Denuncia de un particular
La investigación policial se inició a raíz de una comunicación recibida en el correo electrónico de atención al ciudadano de la Policía Nacional [email protected] donde se denunciaba que el vídeo había sido colgado en la conocida red social.
Las imágenes prueban, según la Policía, que el youtuber condujo un vehículo de alta gama a 233 kilómetros por hora una vía de servicio de la carretera M-45, sentido Valencia, limitada a 80 kilómetros por hora. En su canal, dedicado al mundo del motor, suele colgar vídeos sobre pruebas que efectúa con los vehículos, y comenta los puntos positivos y negativos de cada coche y las reparaciones que él mismo realiza.
Este canal cuenta con más de dos millones de suscriptores y más de 445 millones de visualizaciones. A los cuatro días de su publicación, el vídeo ya contaba con 1,3 millones de visualizaciones.
El que le prestó el coche se desentiende
Con las imágenes, los agentes lograron identificar el tramo de la vía donde se produjo el delito contra la seguridad vial, al propietario y al conductor del vehículo.
El vehículo utilizado para la comisión del delito era un coche de alta gama que uno de sus seguidores le había prestado, para que lo probase y publicase en su canal.
En su toma de declaración, el propietario del vehículo reconoció su disconformidad con el conductor por el hecho de que se hubiese mostrado la matrícula del coche en el vídeo y de que probara en la vía pública la velocidad que podía alcanzar.