Lo adelantó en primicia LA CRÓNICA este miércoles y se ha confirmado al amanecer del jueves: una grúa de gran tonelaje está actuando desde Doctor Mayoral (la popularmente conocida como Cuesta del Reloj) para levantar el cimborrio de la torre e introducir entre medias una estructura metálica que sirva para facilitar su restauración sin necesidad de desmontarlo.
La tregua de la climatología ha ayudado y así, sin viento ni lluvia, los trabajos se están realizando este 10 de octubre sin aparentes problemas. Según el plan, además, los ocupantes de varios despachos del Ayuntamiento tendrán que trasladarse en esta jornada al Edificio Arriaca, en la plaza del Consejo, como medida de precaución.
En su día, los técnicos ya advirtieron por escrito de que «en caso de que la estructura metálica que corona el campanario esté en condiciones pésimas y no se pueda reforzar, se descalzará toda la estructura completa para ser bajada y trasladada a un taller». Un artesano que fue difícil de encontrar y con el cual ya estaba planificada la recepción de tan inusual enfermo al que se le va aplicar tratamiento, pero «a domicilio».
Un problema declarado hace tres meses
Va ya para tres meses desde que se tomó la decisión, a la luz de los informes técnicos, de reparar con urgencia la torre de las casas consistoriales. Desde entonces, es notoria la presencia de los andamios y de los telones que los cubren.
Los técnicos alertaron del alto grado de corrosión de la estructura. «Es una medida cautelar y obligada, para evitar que las vibraciones afecten a la estructura del campanario, que va a ser reformado y restaurado con carácter urgente tras confirmarse que la estructura de la torre está seriamente dañada, hasta el punto de que podría colapsar».
«Colapsar» es el anglicismo generalizado entre los arquitectos para lo que en castellano siempre ha sido un derrumbe. Eso era en julio y, como es notorio, en octubre no se ha producido.
Entre las obras previstas est la demolición de la cobertura actual de la cubierta y las escaleras de acceso. También se desmontará todo el mecanismo del reloj, para luego reponerlo, «con el objeto de reforzar los forjados y vigas, restaurando toda la estructura metálica».