«Desde las 16.03, incidencia que afecta el Centro de Tráfico Centralizado de Adif en Madrid. Por seguridad, Adif, cuyos técnicos trabajan en la resolución, indica que todos los servicios de la red convencional en Madrid se detengan en estaciones a la espera de la resolución». Con este tuit se alertaba a los usuarios de Cercanías de Madrid, desde la cuenta en Twitter, de la enésima incidencia en el servicio. Y la de este jueves, de un alcance absolutamente inusual.
«Se trata de una incidencia que afecta a los sistemas de regulación del tráfico ferroviario en el ámbito de cercanías», ha llegado a reconocer Adif en un mensaje alas 17.13 horas de este jueves.
Minutos más tarde, sobre las cinco y media, se empezaba a reanudar el servicio, pero con retrasos acumulados en todas las líneas y muy lejos de recuperar la normalidad en las circulaciones. La cosa no se fue normalizando hasta por la noche, cuando ya empezaba a oscurecer, mucho más allá de las 21.00 horas.
La avería se ha localizado, según fueran las fuentes, en Torrejón de Ardoz y al mediodía o en Chamartín.
Lo constatable es que se ha ordenado la parada de los trenes de Cercanías de toda la red madrileña en las estaciones “por seguridad”.
Por mucha prisa que hayan querido tener en arreglar la incidencia, los retrasos se han ido acumulando de manera exponencial, al igual que el tiempo de las paradas en las estaciones. Eso sí, advierte de las “fuertes demoras” y las posibles detenciones prolongadas de los trenes.
Hacia las seis y media de la tarde, las demoras que vaticinaba Renfe eran de entre media hora y un cuarto de hora, según lo expresado en sus redes sociales. Y, así, durante las siguientes horas.