García-Page sigue hablando sobre su partido y lo quele rodea. Este martes lo ha hecho en Antena 3.
En cuanto al congreso que los socialistas han celebrado este fin de semana en Sevilla, tras cuestionar que se haya planteado como un «espectáculo-mítin», ha echado en falta que el secretario general «rinda cuentas» y se abriese un debate, como era tradición en estos conclaves.
«Confío en que esta intención, en cuanto un tanto radical que se plantea ahora, pues no sea la que marque el devenir de los acontecimientos».
Dicho esto, ha alertado de que aún «no se sabe» cuáles son las consecuencias de plantear que la Ejecutiva sea «una extensión de la secretaría general», pues considera que el modelo «muy plebiscitario» instaurado «aún no se ha llegado a digerir».
En cuanto las ponencias, luego de considerar que «han llegado al congreso muchísimo más moderadas, mucho más reconocibles con la ideología clásica de lo que aventura la gestión del Gobierno», ha lamentado que las cuestiones que son controversias para el Ejecutivo central «no se hayan dejado ver».
«No aparece la palabra indulto, amnistía, se ha querido evitar problemas, pero es que además en el terreno central de la financiación, han sido muy útiles todas los debates y las opiniones que hemos mantenido en público, han servido realmente porque la dirección se dio cuenta desde el primer momento de que si se planteaba la ratificación del acuerdo con Esquerra Republicana del Partido Socialista catalán, no iba a salir adelante. Al contrario, que había un serio riesgo de una fractura estructural de la organización».
Dicho esto, ha opinado que lo «verdaderamente importante» de los congresos no es solamente lo político, sino «analizar gestos», añadiendo que «se notaban muchísimas corrientes de fondo».
«Lo que sucede es que en los partidos políticos la expresión a veces de la opinión va en el ruido, en el nivel de los aplausos», ha precisado.
Sobre Felipe González
De igual modo, el titular del Ejecutivo castellanomanchego ha vuelto a reivindicar la figura de Felipe González, señalando que su marcha «fue un drama para todos». «Hay un antes y un después con Felipe González en la historia de España en muchos aspectos, pero la del PSOE por completo».
Preguntado por las palabras del ministro Óscar Puente, que aseguró que no necesitan a González porque ya tienen «al mejor líder y al mejor proyecto», García-Page ha indicado que esta cuestión no le preocupa, porque «no busca protagonismo».
«Yo estoy en el final casi de mi trayectoria política y aspiro simplemente a no tener que tapar ni tachar de mi currículum durante tantos años todo lo que he creído», ha dicho García-Page, que tras retratarse como «político vocacional», ha manifestado estar «orgullosísimo de todo» lo que le ha pasado en la vida.
«Incluso reconozco muchos errores y cosas que no debieran haber sido. Pero no estoy dispuesto, para ser mejor político, a dejar de ser persona. Me siento en este momento enormemente querido, vaya por donde vaya en España», ha terminado asegurando.
La víspera, el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, aseguraba este lunes que el ‘caso Koldo’ que afecta al exministro José Luis Ábalos tiene aspecto de «bomba de racimo» y «muchas ramificaciones. «A mi personalmente me preocupa», ha señalado.
En una entrevista en ‘La Brújula’ de Onda Cero, Page señaló que la sociedad española «tiene perfectamente definida la responsabilidad» en este caso de corrupción.
Según entiende, el asunto de Koldo, Ábalos «y derivadas» tiene un aspecto «de bomba de racimo» y «muchas ramificaciones». Para Page, los ciudadanos, en el caso de que haya consecuencias penales y judiciales» para quien fuera ministro y una persona que estuvo «en el origen del resurgimiento de Pedro Sánchez», van a saber establecer «una relación causa-efecto» por «mucha distancia» que quieran poner en el PSOE.
Preguntado por el Congreso Federal que los socialistas celebraron el fin de semana en Sevilla, el presidente de Castilla-La Mancha ha afirmado que es no es partidario del «culto a la personalidad» aunque ha reconocido que el PSOE «se siente muy atacado», no solo por temas judiciales, sino también por una situación política «de un estrés enorme»
Por otra parte, Page no ha compartido las declaraciones de la ministra de Hacienda y vicesecretaria general del PSOE, María Jesús Montero, que acusó al PP de tener un «proyecto golpista». «Me parece un exceso», ha zanjado.