No podía haber un lema más acertado en este año para el día mundial de la Salud. ¡Qué año tan difícil! Cuando echamos la mirada atrás aún cuesta creer que hace un año estábamos confinados, en plena lucha contra la COVID19 con un ejército al frente que nos han demostrado (y con creces) que son indispensables.
La Salud es fundamental para una sociedad, porque una persona saludable vive feliz, se desarrolla profesional y personalmente aportando lo mejor de sí mismo en la sociedad. Esto no es nada nuevo, es pura lógica. Sin embargo, lograrlo no es tan sencillo.
Tenemos algunas asignaturas pendientes que son importantes. Por ejemplo: necesitamos avanzar en los cuidados y atenciones de aquellas personas que sufren una enfermedad crónica como: ELA, fibromialgia, esclerosis, etc. Son muchas las asociaciones sociosanitarias que atienden a estos pacientes porque nuestro Sistema Nacional Sanitario no llega. Por lo tanto, hay que cuidarlas mantenerlas abiertas y apoyar a estas entidades, especialmente, en una etapa tan difícil con una crisis sanitaria y social como la que estamos viviendo.
Y la segunda asignatura que tenemos pendiente es la inversión en la Salud Mental. El confinamiento nos va a pasar factura como sociedad (de esto no hay duda). Vamos a hablar de esta cuestión, a afrontarla sin tabúes dejando a un lado los estigmas. Debemos de trabajar y fortalecer los servicios de Salud Mental.
Finalmente, y cómo es evidente no podemos dejar de lado la realidad que nos rodea. Si queremos construir un mundo más justo, más equitativo y más saludable, necesitamos vacunas, más vacunas, vacunar rápido. No me cansaré de pedirlo y decirlo en cualquier foro que sea necesario.
En este día mundial de la Salud, sintámonos agradecidos por la Sanidad de la que dispone este país, con un gran equipo de profesionales al frente que luchan contra viento y marea. Y sobre todo, cuidémonos y cuidemos de los nuestros cumpliendo con las medidas de seguridad contra la COVID19.