Ha sido uno de los proyectos que ha acompañado a María Jesús Merino en sus primeros cuatro años como alcaldesa de Sigüenza. La reforma de la centenaria Alameda no estuvo exenta en los comienzos de polémica. El resultado ya está a la vista. LA CRÓNICA lo muestra, además, con el encanto que da aguardar a la noche para el reportaje fotográfico de una autora local, sin más inconveniente que las gélidas temperaturas de esta época del año y a esas horas en la Ciudad Mitrada. Un placer solitario.
Según ha podido confirmar este diario, hasta finales de mes hay margen para los últimos remates de esta ambiciosa obra. En marzo, presumiblemente, se llevará a cabo la inauguración oficial. Pero los lectores ya pueden comprobar, aquí, el resultado:
Como se comprueba, se ha modificado el paseo lateral más próximo a la calle, considerándolo como espacio de transición entre el parque y la ciudad. Es allí donde pasan a estar a partir de ahora los usos de tipo comercial y de restauración. Se han ubicado en la zona norte del paseo los usos de ocio y juegos y se han sustituido y mejorado las instalaciones existentes, como canalizaciones de agua, saneamiento, alumbrado público, instalación eléctrica o telecomunicaciones. Este trabajo subterráneo es, según destacan fuentes municipales, el que más relevante, aunque no sea visible.
También se han restaurado los elementos de valor histórico y ornamental existentes dentro del parque, tales como puertas, pirámides, quioscos, y se han colocado nuevos elementos.