El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha reiterado que su opinión sobre la amnistía «es la que es», y que «el tiempo va a favor del aspecto más bochornoso que tiene, que es lo que pretende Puigdemont». «Puigdemont tiene intención de humillar al Estado todo lo que pueda», ha advertido el dirigente socialista.
En un discurso, con motivo de su visita al Hospital de Ciudad Real, García-Page se ha vuelto a pronunciar sobre los pactos y las negociaciones para la investidura de Pedro Sánchez. Así, ha destacado que él no entra «en la capacidad que tengan los políticos negociadores en dejarse humillar o en intentar hacerlo», pero aquí –ha avisado– «alguien va a terminar siendo ‘botifler’, o uno u otro. Esta es la realidad. O para una parte de España, o para el conjunto».
«Lo que no se puede es humillar al país, porque de ahí vendrán enfermedades distintas. Y yo no sé si las podremos curar en este hospital, por mucho PET TAC que podamos comprar», ha ironizado.
«Esquerra tiene una posición más moderada, eso sí», ha apostillado García-Page a preguntas de los medios en Ciudad Real, donde visita el nuevo equipamiento del Servicio de Medicina Nuclear y Radiología Intervencionista del Hospital General Universitario.
En esta línea, García-Page ha afirmado que no le sorprende que el expresidente de la Generalitat y eurodiputado de Junts, Carles Puigdemont, paralizara las negociaciones, hoy retomadas y que han terminado este viernes a media mañana sin lograr un acuerdo sobre el alcance de la ley de amnistía.
«Puigdemont ha avisado que él fue a la investidura en tres ocasiones y que hasta la última no salió. De Puigdemont te puedes esperar cualquier cosa. Comprometió no declarar la investidura, era el pacto que tenía con todo el mundo, empezando con presidentes autonómicos a los que le dijo en su día que no iba a firmar nunca la declaración de independencia. Le empezaron a insultar ‘botifler’ en la puerta y terminó firmándola. Y mire la que se ha liado», ha dicho.
Lo que «no podemos bajo ningún concepto» –ha continuado– «es convertirlo en blanco y negro». «Lo que hicieron es un atropello constitucional de enorme gravedad que nos ha traído consecuencias de todo tipo. Y lo que buscan no es siquiera poder volver a pasear por las calles», algo que «humanamente todos lo podemos entender», sino que «lo que buscan es volver a otro atropello constitucional porque quieren acabar con la Constitución», ha denunciado el presidente.
«¿Es legítimo que quieran la independencia? Sí. Lo que no es legítimo es que lo hagan de cualquier manera y saltándose el derecho. Y cuando se han saltado el derecho, les conviene, lo cambian. Cambian el derecho. La Constitución obliga a la igualdad de todos los españoles. Por tanto, una excepción al principio constitucional de igualdad ante el derecho de todos los españoles tiene que tener alcance y reflejo constitucional. Pero es una tesis personal».
Sobre el hecho de que en la amnistía se quieran incluir otros nombres como Laura Borràs, el presidente de Castilla-La Mancha ha subrayado que no conoce los detalles. «La verdad es que no me consultan. Eso es una pena. Me podrían consultar un poco más», ha ironizado.
Cuestionado por el pacto al que ha llegado el PSOE y ERC para condonar parte de la deuda de Cataluña, en su caso el 20% del total, una quita de deuda que se extrapolará al resto de comunidades autónomas, García-Page ha respondido que se «fía» del Gobierno.
«Las palabras en este momento de la política tienen un valor de minutos, porque se pueden decir palabras contrarias al día siguiente», ha incidido García-Page, quien asegura que en esto sí se fía del Gobierno. «No tengo la más mínima duda, porque es que, además, la ley obliga a que lo que se haga sea para todos. Por lo tanto, está por encima de eso la ley. Hasta que la cambien. Nos podrían amnistiar de toda la deuda, que sería mejor», ha concluido.