Según ha confirmado a LA CRÓNICA el concejal de Seguridad, Chema Antón, desde el mediodía del domingo están cortados los accesos a la vereda del río Henares, dada la crecida registrada.
Por segunda vez este invierno, el nivel del agua ha subido de manera más que ostensible y, de nuevo, esto se ha producido sin que al Ayuntamiento de Guadalajara se le haya comunicado desembalse alguno.
Ante esta situación, además de las limitaciones indicadas en el acceso para los peatones, la Policía Local está llevando a cabo rondas de vigilancia y control cada media hora.