Quien no haya estado rápido, se lo ha perdido por anticipado. En apenas 24 horas se han agotado todas las entradas para la corrida que el 12 de octubre se celebrará en Córdoba. Será un mano a mano entre el celebérrimo Morante de la Puebla y el mucho menos conocido, pero intensamente apreciado por los buenos aficionados, Juan Ortega.
Juan Ortega Pardo es un orgullo para cientos de sus paisanos del Señorío de Molina, pues aunque nacido y criado en Andalucía, sus vínculos con Checa y toda la comarca no sólo han permanecido firmes, sino que se han acrecentado desde que apuntaba como becerrista hasta hoy.
El punto más culminante hasta ahora en su trayectoria fue la faena a un toro de Valdefresno el día de la Virgen de la Paloma, en Madrid. Aquel 15 de agosto de 2018 en Las Ventas fue un no parar de restregarse los ojos para muchos aficionados del Foro, ante la elegancia, sobriedad, aplomo, variedad y clasicismo que destilaba la franela de Juan Ortega, torero por vocación y por arte.
Cómo sería aquello que valió para mantenerle en lo más alto de las expectativas hasta que este mes de agosto, de noche y ante las cámaras de televisión, dibujara sobre el ruedo de Linares la que ya pasa por ser, con rara unanimidad, la mejor faena en la temporada del coronavirus.
El aforo del coso de los califas se ha limitado a 2.350 espectadores.