Martes de sobresaltos en la provincia de Guadalajara por los incendios forestales, especialmente porque fueron a coincidir tres en diferentes puntos: Driebes, Budia y Auñón. Todos están a punto de quedar extinguidos.
Al amanecer del miércoles, la situación era similar en todos los casos, con las llamas controladas pero no totalmente extinguidas y sin cuantificar la superficie afectada. Mientras que en Driebes se ha comenzado el miércoles con una sola persona desplazada hasta la zona del incendio, en Budia todavía son 10 los medios mecánicos y 42 las personas que intervienen. En Auñón se está buscando la extinción total con 2 medios y 18 trabajadores.
Incendio en Auñón
En el caso de Auñón, el 6 de julio comenzaba con 18 trabajadores desplazados hasta la zona, más dos medios terrestres. En los momentos de mayor intensidad han llegado a participar 35 trabajadores y 8 medios. El foco inicial se había detectado poco después de las cuatro y media de la tarde del martes. Se dio por controlado a las once y cuarto de la noche, después de avanzar por una zona con mayoría de pinos y bastante carrasca.
Incendio en Budia
En el caso de Budia, la movilización llegó a ser mayor, en un siniestro que se había iniciado muy poco antes. El aviso se dio a las tres y cuarto de la tarde de este martes. La eficacia en las labores de extinción hizo que las 144 personas llegadas a estos parajes y los 32 medios empleados (11 de ellos aéreos) fueran suficientes para dar por controlado el incendio a las ocho y media de la tarde. Las tres cuartas partes de lo quemado era pino, según el mapa forestal.
Incendio en Driebes
En cuanto a Driebes, las llamas se localizaron en el llamado Pico del Águila y fue el incendio más madrugador de la jornada. Se extendió por pastizales y requirió en algún momento de la intervención simultánea de 64 personas y 19 medios, de los cuales 10 fueron aéreos.