El proceso para dar entrada a cada vez más operadores de alta velocidad no supondrá, necesariamente, disponer de más opciones de transporte en la estación de Guadalajara-Yebes. En la segunda mitad de 2022 se sumará un nuevo operador, ILSA, bajo la marca comercial iryo. Según han confirmado a LA CRÓNICA fuentes de la propia compañía, en los planes iniciales no figura hacer parada con sus circulaciones en la estación alcarreña.
Estamos ante el primer operador privado español de alta velocidad, que se ha presentado en sociedad el pasado viernes, con una comparecencia ante los medios en la estación de Atocha.
La nueva iryo tiene como accionistas a Air Nostrum y Trenitalia. Para su puesta en marcha dispondrá de 20 unidades del ETR 1000, de diseño italiano y fabricados entre Italia y España por Hitachi Rail en colaboración con Alstom, con un coste global de 1.000 millones de euros.
En Guadalajara, ya que no tendremos acceso al diseño italiano en lo ferroviario, podremos consolarnos con el glamour francés cuando circulen los futuros trenes de Cercanías, de los que ya detalló en su día LA CRÓNICA todas las características.
¿Cómo son los «Frecciarrossa» de iryo?
Los Frecciarossa son bien conocidos. Tienen doscientos metros de longitud y capacidad para 467 pasajeros. Su velocidad máxima es de 360 kilómetros por hora, con pasillos anchos, asientos ergonómicos y sistemas de reducción de ruido y vibraciones.
Las operaciones sobre la línea Madrid-Barcelona las desarrolla esencialmente Renfe, tanto con sus AVE como con los low cost AVLO. Los precios baratos, de 7 euros, son la excepción mientras que por norma más habitual rondan los 20 euros por trayecto en entre Guadalajara-Yebes y Madrid.
También utiliza este trazado, gracias a la liberalización del sector, la francesa OUIGO, aunque de un modo mucho más limitado y sin paradas en Guadalajara: sólo lo hace en Zaragoza y Tarragona, además de en las cabeceras.