Tras el cierre decretado por el Ayuntamiento de Guadalajara de la capilla Luis de Lucena por amenaza de riesgo para las personas, el delegado provincial de Educación, Cultura y Deportes, Ángel Fernández-Montes, ha advertido que esta decisión «contraviene la normativa legal» y la Ley de Patrimonio de Castilla-La Mancha, al tiempo que se ha comprometido a que el monumento estará abierto «en breve».
«Mi compromiso es que este BIC tiene que estar abierto en breve porque no podemos privar a la ciudadanía de su derecho a visitarlo», ha señalado el delegado, en una comparecencia ante los periodistas, en la que se ha mostrado bastante contrariado y ha indicado que no descarta acudir a los tribunales si es preciso para aclarar la situación de este BIC del Ministerio de Cultura, cuyo mantenimiento corresponde al Ayuntamiento.
Fernández-Montes ha realizado estas manifestaciones a raíz de que el Ayuntamiento de Guadalajara haya decidido cerrar la capilla Luis de Lucena, basándose en el «riesgo inminente» para los visitantes dado el mal estado de la parte trasera de la antigua gasolinera de Diges, lo que en opinión del concejal de Urbanismo, Alfonso Esteban, estaba afectando al único acceso a este monumento.
De ahí que el edil reclamase ayer mismo a la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha actuar para «desatascar un problema histórico» de un inmueble, que puede derrumbarse.
Sin embargo, la versión que ha ofrecido el delegado de Cultura, que ha comparecido con personal del Servicio de Patrimonio de la Junta, es muy diferente. Según Fernández-Montes, la capilla Luis de Lucena es un BIC que debe estar abierto al público y para proceder a su cierre, el Ayuntamiento debería haberlo solicitado a la Administración de Castilla-La Mancha y «esto no se hizo».
Ante este motivo de conflicto, Fernández-Montes insiste en que es el Ayuntamiento quien debe instar al propietario de la antigua gasolinera de Diges a que actúe sobre el muro medianero con la capilla que se está cayendo y que si este no responde, actuar él subsidiariamente y pedir luego el pago de los costes.
Desde la Junta, Fernández-Montes afirma que actuarán contra la resolución del Ayuntamiento en la que se dice que tienen que hacerlo ellos y que lo harán con los argumentos necesarios y «si hay que ir más allá, se hará», no descartando acudir a los tribunales.
El delegado de Cultura no comprende la actuación del Ayuntamiento, sobre todo porque hace varias semanas se trató este asunto y tras una reunión ya se acordó por ambas partes que habría que requerir al propietario de la antigua gasolinera que tenía que hacer algo al respecto.
«Empezamos mal», afirma Fernández-Montes, asegurando que con esta decisión el Consistorio «está vulnerando un derecho» de los ciudadanos y recordando que la propia ley de Patrimonio de Castilla-La Mancha habla de colaboración institucional de las entidades locales y de su obligación de comunicar «todo hecho que pueda poner en peligro la integridad de los bienes».
Para Fernández-Montes, se trata de «una piedra más que tiran» fruto de «medias verdades» y considera «triste» que se haya decidido cerrar un BIC porque haya un muro de metro y medio que haya que acometer «que se soluciona en dos días», reprochando al Ayuntamiento su falta de interés por el patrimonio de la ciudad.
Por no ventilar bien, riesgo por hongos en la capilla de Luis de Lucena
Desde la Junta han recordado que recientemente realizaron una inspección específica a la capilla de Luis de Lucena donde sí detectaron que había mucha humedad por condensación más que por el otro edificio, es decir, por no estar bien ventilada, una humedad que parece ser que está afectando a las pinturas y creando hongos en las paredes, según el servicio técnico de Patrimonio de la Junta de Castilla-La Mancha.
Ha indicado que todavía no conocen el informe del área de Urbanismo del Ayuntamiento, pues están esperando a que les llegue, y será entonces cuando llevarán a cabo las acciones legales correspondientes, ha incidido el responsable provincial de Cultura, convencido de que los informes tienen que ser «serios» y no obviar determinadas cosas.
Desde los Servicios Técnicos de la Junta recuerdan que el Ayuntamiento carece de un catálogo urbanístico actualizado de los bienes integrantes del patrimonio con las actuaciones permitidas y las que no, y le recriminan su falta de interés por hacerlo pese a que desde la Junta se le ha requerido en distintas ocasiones realizar ese instrumento urbanístico para seguridad jurídica de los ciudadanos y para la protección de todo el patrimonio.
Tampoco entienden la situación y advierten que actuarán en consecuencia, recordando que Guadalajara es la única capital región que no tiene un inventario del patrimonio cultural de sus bienes actualizado, lo que sería bueno a la hora de proyectar obras para hacer más fácil la planificación, además de que crearía «una mayor seguridad jurídica para todo el mundo».