El anunciado viaje a Kiev del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para reunirse con su homólogo ucraniano, Volodimir Zelenski, contará con el apoyo sobre el terreno de un equipo del Grupo Especial de Operaciones (GEO) de la Policía Nacional, con sede en Guadalajara.
El viaje, del que no se ha facilitado la fecha exacta por motivos de seguridad, se ha confirmado en paralelo a que el presidente anunciara la reapertura de la Embajada en la capital ucraniana, una de las ciudades atacadas por las tropas rusas.
El GEO, como bien saben los vecinos de Guadalajara, es el grupo de élite de la Policía Nacional y resulta decisivo en este tipo de operaciones de alto riesgo. Agentes de esa unidad ya fueron movilizados para reforzar al contingente que daba seguridad a la Embajada hasta su evacuación en convoyes de autobuses antes de iniciarse la guerra. Junto a la delegación viajaron hasta la frontera con Polonia decenas de españoles residentes en Ucrania.
Los policías se encargaron también de asegurar físicamente el edificio de la Embajada de España –dirigida por Silvia Cortés– y arriar y custodiar la bandera española dentro de la bautizada como ‘Operación Prusia’, formada por un grupo de nueve GEO y otros tres miembros de los Equipos Sierra de la Policía Nacional. Otros 18 agentes de la unidad de élite dieron apoyo en la frontera entre Ucrania y Polonia en coordinación con las autoridades españolas.
En Guadalajara desde su creación, en 1978
El presidente del Gobierno visitó a principios de marzo el acuartelamiento de Guadalajara, como informó ampliamente LA CRÓNICA.
Creado en 1978, el GEO tiene una dilatada trayectoria en este tipo de misiones fuera de España, así como en la desarticulación de grupos terroristas o la protección de personalidades en casos especiales que precisan de una especial cualificación.
En el operativo de evacuación de Afganistán por la llegada al poder de los talibanes, por ejemplo, participaron diez miembros del GEO y siete de las Unidades de Intervención Policial (UIP), en este caso encargado de la ‘cápsula’ de seguridad en torno al equipo de la Embajada de Kabul.
El viaje de Sánchez tendrá lugar apenas dos semanas después de que el mandatario ucraniano interviniera ante diputados y senadores por videoconferencia en el Pleno del Congreso de los Diputados, cuando aprovechó para afear a las empresas españolas que aún mantienen negocios con Rusia y para equiparar la situación de su país con la vivida en la ciudad de Guernica en 1937.
Sánchez seguirá así los pasos de un puñado de mandatarios que en las últimas semanas han visitado Ucrania a pesar de la invasión rusa, entre ellos la responsable de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, y el Alto Representante de Política Exterior de los Veintisiete, Josep Borrell, así como los primeros ministros de Eslovaquia, Eduard Heger, y el canciller de Austria, Karl Nehammer, o el jefe de Gobierno de Reino Unido, Boris Johnson, entre otros.