No es una novedad, pero ha vuelto a repetirse: el que los cuarteles de la Guardia Civil en la provincia estén habitables y no se vengan abajo por puro abandono no es una responsabilidad asumida por la Administración de la que dependen. Los lectores de LA CRÓNICA quizá recuerden, a este respecto, lo que ocurrió en Mondéjar hace dos años: a la inauguración acudió para asumir el protagonismo una directora general que ya no está y que tampoco tuvo que firmar liquidación alguna para el pago de las obras, que abonó la Diputación de Guadalajara.
Ahora, la Junta de Gobierno de la Diputación de Guadalajara acaba de aprobar el acuerdo de aportaciones económicas al convenio con la Guardia Civil para obras de conservación y reparación en acuartelamientos de la provincia durante el ejercicio 2024. En virtud de la relación priorizada de actuaciones decidida por la Dirección General de la Guardia Civil, este año se mejorarán los cuarteles de Molina de Aragón, Pastrana y Cogolludo.
En el primero de ellos, el de Molina de Aragón, la actuación consistirá principalmente en la instalación de sanitarios y climatización en los vestuarios, además de realizar el enfoscado de la fachada. En el acuartelamiento de Pastrana se procederá, gracias a la financiación acordada en el convenio, a la reforma el tejado, mientras que el de Cogolludo verá acondicionado su vallado perimetral.
En conjunto, la Diputación de Guadalajara invertirá un máximo de 150.000 euros, asumiendo tanto la financiación como la elaboración de los correspondientes proyectos la gestión de los expedientes de contratación de las obras respectivas con empresas especializadas del sector, así como la dirección facultativa y el abono de los importes comprometidos. Por su parte, a la Dirección General de la Guardia Civil (Comandancia de Guadalajara) le corresponde, en virtud del convenio aprobado, la tramitación y abono de los permisos, licencias y autorizaciones administrativas que, en su caso, deban obtenerse.
Una vez redactados los proyectos y e integrado el crédito disponible, en caso de exceso se podrá utilizar para otros proyectos, con el límite total previsto por la Diputación.