A pie, en coche y en tractor han protestado este miércoles por la ciudad de Guadalajara numerosos agricultores de la provincia. El día de San Valentín era el que estaba marcado en el calendario para la gran tractorada de APAG, COAG y UPA, organizaciones muy representativas del sector y que han movilizado a muchos cientos de personas este 14 de febrero en la capital alcarreña.
El punto de concentración era la Ronda Norte, para luego seguir por la Avenida de Francia hasta Bejanque, discurrir por el Paseo de las Cruces y llegar hasta las instalaciones de APAG por Constitución y Julián Besteiro. Todo se ha hecho con normalidad y mediante una caravana que tardaba más de una hora en pasar por cualquier punto del recorrido.
Quede para la historia la anécdota de que al volante del primer tractor iba una mujer. O contemplar cómo los tractores se paraban ante los semáforos. Y como los coches que circulaban en dirección contraria jaleaban a los manifestantes, con gritos de apoyo.
La jornada ha dado para muchas imágenes, algunas de las cuales las recogemos aquí:
Dos toneladas de grano en Guadalajara
Agricultores y ganaderos procedentes de todos los puntos de la provincia han sacado este miércoles más de 200 tractores de las calles de la capital, donde han formando una columna de vehículos que han cruzado la ciudad y soltado 2.000 kilos de grano en la glorieta de la Constitución.
El sector primario ha vuelto a salir a la calle para hacer llegar su voz, reivindicaciones que también han hecho llegar a la Subdelegación del Gobierno en Guadalajara, provocando cierto colapso y algunas retenciones inevitables por la presencia de vehículos agrícolas por las calles de la ciudad.
Para el presidente de la Asociación de Agricultores y Ganaderos de Guadalajara (APAG), Juan José Laso, la manifestación «es ya un éxito, una movilización histórica» en la provincia, todo ello pese a lamentar que no les hayan dejado partir desde la Ronda Norte como tenían inicialmente previsto.
Desde COAG, su responsable en Guadalajara, Ángel Gálvez, espera que esta concurrida movilización tenga los resultados que esperan y que sus necesidades sean atendidas. «Es lo que necesitamos todos».
Ecos diferentes de las convocatorias en la región
Las organizaciones agrícolas de Castilla-La Mancha, convocadas por Asaja, UPA y COAG, han protestado este jueves con el corte de diversas carreteras de la región para protestar por la situación de los agricultores y ganaderos, incidiendo en su descontento con la nueva Política Agraria Común (PAC), la Agenda 2030, los productos procedentes de países de fuera de la Unión Europea o los precios que perciben por sus productos.
En la protesta organizada en Madridejos, en el kilómetro 121 de la carretera A-4, en la confluencia con la Autovía de los Viñedos, se han reunido unas 400 personas, según ha calculado el secretario general de Asaja en Ciudad Real, Florencio Rodríguez, que ha comparecido ante los medios junto a la responsable de UPA Castilla-La Mancha, María Sánchez.
Rodríguez ha incidido en que «en justicia corresponde que ayuden al campo», aunque a su vez ha criticado que, con la situación del sector primario, «al paso que vamos hay gente que no quiere ni trabajar porque vive mejor con ayudas que trabajando» por su baja rentabilidad.
«El campo no puede subsistir, no podemos vivir, nos estamos arruinando en muchas explotaciones», ha manifestado, incidiendo en que las decisiones que se toman desde el Ministerio «no son buenas para los agricultores y ganaderos españoles».
De igual modo, ha considerado que las medidas tomadas por la Unión Europea «son totalmente insuficientes», afirmando que «hay que dar un giro radical a la política europea y la política agraria en este país» y «hacer las cosas mucho mejor de lo que se están haciendo».
«Cuando se legisla o se hace algo para que se cumpla en el campo se tiene que hacer con los agricultores y ganaderos, con los responsables del campo, no con los políticos, y por eso el gran fracaso que tiene la política agraria, sea donde sea», ha apostillado.
De su lado, María Sánchez ha considerado que Europa «tiene que volver la cara a sus inicios». «Los inicios de Europa han sido garantizar la alimentación de Europa», ha reseñado, afirmando que son las pequeñas explotaciones familiares agrarias las que garantizan «que se produzca en unas condiciones de sostenibilidad y una calidad diferenciada que tiene que ser reconocida».
En opinión de Sánchez, la PAC «tiene que ir sobre todo a proteger a las pequeñas explotaciones, que son las que tienen un papel de cohesión en el medio rural y las que hacen que Europa funciones y no le falten alimentos».
«Por lo tanto, nosotros estamos aquí para reivindicar que Europa, España y las comunidades autónomas presten una atención especial a los pequeños agricultores y ganaderos, que somos el 99,9% de los que hay en este país», ha concluido.
Mientras en Otero, la presidenta de Asaja Toledo, Blanca Corroto, ha cargado contra la nueva PAC y especialmente con los ecorregímenes, aseverando que en «la mayoría» del terreno de la provincia de Toledo «es muy difícil de aplicar».
Desde la protesta organizada en el kilómetro 90 de la A-5, Corroto ha pedido que «estas prácticas», basadas en «políticas medioambientalistas», se elimine «o si no desaparecen, por lo menos que sean flexibles para que nosotros podamos cumplirlas».
De igual modo, ha hecho mención a la Ley de la Cadena Alimentaria, que fue una norma en la que trabajaron «muchísimo» pero que «al final no seguimos». En este punto, ha incidido en que «tiene que cambiar». «A nosotros nos tienen que garantizar un precio mínimo con nuestros productos, que cubra los costes de producción que tenemos aquí».
Mientras, la secretaria general de UPA Toledo, Elisa Fernández, ha recalcado que la situación es «complicada» y «no es de ahora, ya es histórico, como una tradición». «Estamos hoy aquí y seguiremos estando si es necesario y no conseguimos lo que queremos, porque necesitamos una revisión profunda de la PAC», ha añadido.
Fernández ha manifestado que Europa «tiene que cambiar también las políticas que tiene con terceros países», apuntando que no pueden negarse a que entren productos de esos países pero quieren «que entren en las mismas condiciones de producción y de comercialización y que se les exija lo mismo que se exige a nuestra gente».
Y también ha hecho hincapié en que «hay que subir las sanciones». «Lo que no puede ser es que las sanciones a las grandes superficies y las grandes industrias sean de 3.000 euros, porque al final esos 3.000 euros se los está quitando a un ganadero de leche, por ejemplo, cuando le bajan el litro de su leche», ha ejemplificado.
‘PINCHAZO’ EN VILLARRUBIO, UNIDAD EN VILLAR DE CANTOS
Finalmente, en Cuenca, la reivindicación convocada en el kilómetro 90 de la A-3, en el término municipal de Villarrubio, finalmente no se ha producido por ausencia de manifestantes, mientras que la del kilómetro 160 de esa misma vía, en Villar de Cantos, sí que ha contado con 300 personas, según la organización.
El regional de Asaja y que ostenta ese mismo cargo en la organización en la provincia de Cuenca, José María Fresneda, ha reivindicado «la unidad del sector» para lograr los objetivos del campo «para conseguir lo que están logrando los agricultores y ganaderos de la Unión Europea».
«No queremos esta PAC porque no podemos cumplir lo que dice y eso supone que nos quiten presupuesto», ha manifestado, reivindicando entre otros asuntos cláusulas espejo para que a las importaciones no procedentes de la UE se les aplique la misma normativa que a los productos de dentro de la Unión, recordando que «la única producción que genera seguridad alimentaria, bienestar animal y percepción del medio ambiente es la que se produce en Europa».
Por su parte, el secretario general de Asaja Cuenca, Manuel Torrero, ha llamado además a la «unidad de acción para sacar adelante las reivindicaciones» y ha advertido que «cualquier movimiento que trate de separar a los agricultores, otro interés llevará».