Con forma de proyecto piloto en las comarcas de La Alcarria y la Serranía Alta de la provincia de Cuenca se va a estrenar un innovador sistema de transporte público bajo demanda. Según ha confirmado a LA CRÓNICA el propio consejero de Fomento del Gobierno de Castilla-La Mancha, Nacho Hernando, no estamos sólo ante el primer intento de aplicar este servicio en la región, sino ante la primera ocasión en España en que se va a plantear «sin horario ni itinerario fijo». Se trata de una experiencia piloto sobre más de 5.000 kilómetros cuadrados, dando servicio a una población estimada de 15.500 personas.
El proyecto inicial de prueba en la provincia de Cuenca le costará a la Junta 450.000 euros al año. Contempla un ‘call center’ de lunes a domingo para atender las llamadas de reserva de plaza para viajar, «un modelo inicial que derivará en una aplicación para teléfonos inteligentes para dar agilidad» según se detalla desde la Administración regional. En el verano de 2020, el propio Hernando lo calificó gráficamente como «un radiotaxi a lo bestia».
De prueba en La Alcarria conquense
Habrá distintas zonas seleccionadas para que coincidan con los centros de salud, de modo que los 72 municipios seleccionados para esta primera experiencia tengan contacto con sus centros de referencia sanitarios en la comarca.
También servirán esos municipios como enlace para hacer trasbordo en líneas más regulares y cotidianas, como Huete, Cuenca, Tarancón u otras localidades de mayor tamaño con líneas regulares de autobús.
Esto contribuirá a «un uso racional y proporcionado de los recursos» para ser «más responsables medioambientalmente».
Vehículos de 10 a 25 plazas
«No tiene sentido autobuses de 60 plazas para ocho personas al día. Serán vehículos más pequeños, que gastan menos, y dará más rentabilidad medioambiental, con vehículos de entre 10 y 25 plazas», ha afirmado Hernando.
No habrá rutas ni itinerarios fijos gracias a contar con herramientas digitales y gestores de flota, algo que «permitirá que la revolución digital llegue al medio rural para que sean reales y efectivos los derechos de las personas».
Tarifas del nuevo servicio
Aunque «puede parecer que este esfuerzo conlleva más gasto», se mantendrán las tarifas de los autobuses en este nuevo servicio, y de media un ciudadano que se quiera trasladar en este transporte pagará 1,30 euros si son menos de 16 kilómetros de distancia, más 0,08 euros por cada kilómetro extra. Además de este precio «asequible», jóvenes y mayores tendrán bonificado el viaje al 50%.
Para ello se han aprobado 3,5 millones de euros –un 27% más– para satisfacer la bonificación de los más jóvenes, una ayuda «fundamental» según el consejero de Fomento.
La próxima semana habrá 950.000 euros más de partida presupuestaria para seguir «consolidando» estos descuentos tanto a mayores como a jóvenes y personas con discapacidad.
«Esto nos tiene que llevar a seguir modernizando el transporte, y el verdadero objetivo será que el transporte público dé una respuesta humanizada», ha aseverado Hernando.