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19 noviembre 2024
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Las críticas del PSOE y Aike contra Guarinos terminan, de rebote, en Alberto Rojo

"Está claro que ni los suyos se quieren quedar con ustedes", planteaba la portavoz socialista este viernes, dirigiéndose a la alcaldesa.

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Desde los distintos grupos políticos del Ayuntamiento de Guadalajara han dado este viernes la enhorabuena al edil entrante en la Corporación, Roberto Narro, que viene a ocupar el puesto dejado por María Patricia, de lo cual viene informando LA CRÓNICA. Todos los grupos han deseado a la concejal saliente suerte en su nuevo cometido. Y ahí se ha terminado la cortesía.

A partir de ahí, los partidos de la oposición municipal (PSOE y Aike) han aprovechado para arremeter contra esta nueva renuncia en apenas tres meses de gobierno de Ana Guarinos y su equipo.

Para la portavoz y única concejal de Aike, Susana Martínez, frente al «tono triunfalista, casi sacando las cornetas» del equipo de Gobierno durante la presentación de su balance de cien días de Gobierno, lo cierto es que ya hay tres «dimisiones» de concejalas.

Unos reproches a los que se ha sumado el Grupo Municipal Socialista, cuya portavoz, Lucía de Luz, ha puesto también el acento en estas «dimisiones» considerando que esto es fruto de que el pacto entre el PP y Vox «tiene más sombras que luces».

«Está claro que ni los suyos se quieren quedar con ustedes», abundaba la portavoz socialista, dirigiéndose a la alcaldesa.

Y frente a esta críticas, la alcaldesa, Ana Guarinos, adoptó un tono didáctico para aclarar que no es lo mismo dimitir que cesar, afirmando que este tipo de decisiones se adoptan libremente, y recriminando la ausencia en el pleno del concejal socialista Alberto Rojo por tener que asistir a la votación del Congreso cuando esta empezaba casi tres horas después del arranque de esta sesión plenaria, en la que cree que sí podría haber estado.

Según Ana Guarinos, lo cierto es que Alberto Rojo «no está en el pleno y no ha renunciado ni presentado su dimisión», sino que «se ha ido a Madrid para asistir a una votación que comenzaba a las 12.15 cuando podía haber estado antes en una sesión plenaria que arrancaba a las 9.30 horas».

«No puede ser que vean ustedes la mota en el ojo ajeno y no vean la arena en el propio», concluyó la alcaldesa.


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