Las cabinas desaparecerán de calles y pueblos en el año 2022. Lo avisaba LA CRÓNICA hace algún tiempo y el veredicto ya es irreversible y se cumplirá. Según Telefónica, encuestas internas revelan que más del 80 por ciento de los usuarios reconocen no haber usado nunca una cabina y, además, desvelan que su uso actualmente es inferior a una llamada por semana y aparato. Usarlas tampoco es fácil, porque ya apenas se ven: en la provincia de Guadalajara a día de hoy apenas se conservan 76 cabinas telefónicas.
Esas cabinas que formaron parte de nuestras vidas durante décadas, se han convertido en objeto de actos vandálicos y a pesar de que hay algunas iniciativas simbólicas destinadas a mantener su recuerdo, irán desapareciendo del paisaje de las ciudades.
La primera cabina telefónica en España se instaló en 1928, a finales de los años 20 en la caseta del Viena Park, actualmente denominado como Florida Park, en el parque del Retiro de Madrid. Se trataba de un aparato que estaba emplazado dentro de un cajetín que se abría para acceder al teléfono.
Este modelo de cabina no era el concepto de cabina que se dio a conocer años más tarde, pero no necesitaba que una operadora estuviera delante del teléfono y controlara la extensión de la llamada. Sin embargo, la primera cabina telefónica que cumplía dicha función se instaló en España en el año 1963, cuando ya habían nacido los primeros baby boommers que tantos problemas van a tener para cobrar la pensión prometida.
Desde hace años prácticamente nadie las utiliza. Tampoco han conseguido usos alternativos, pese a que Telefónica lo intentó. Dejan de ser un servicio público esencial y, por tanto, no hay forma legal de obligar a nadie a correr con el gesto del mantenimiento de estas reliquias.
Con la aprobación por el Consejo de Ministros del proyecto de Ley General de Telecomunicaciones (LGT) la sentencia está dictada, aunque aún haya proceso administrativo y político que cumplir. Las Cortes Generales deberían haber hecho su trabajo al respecto en el primer semestre del próximo año.
¿Habrá nuevo indulto para las cabinas?
Será raro, muy raro, que haya un nuevo indulto, como el ocurrido 2019 cuando el Gobierno decidió prorrogar su inclusión en el servicio universal de telecomunicaciones.
Alrededor de 15.000 aún siguen diseminadas por toda España, ajenas incluso a nuestros ojos. Los que más se han seguido fijado en ellas han sido los gamberros, todo sea dicho.