Castilla-La Mancha inicia la campaña de vacunación de la gripe este miércoles, día 14 de octubre, la primera en un escenario de pandemia, lo que ha obligado al Gobierno regional a modificar determinadas cuestiones y a replantearse algunos procedimientos.
Así lo ha puesto de manifiesto el director general de Salud Pública, Juan Camacho, en rueda de prensa para presentar esta campaña junto a la directora general de Cuidados y Calidad del Sescam, Begoña Fernández.
Tres semanas antes que en 2019
En 2019, la campaña de vacunación de la gripe se inició el 5 de noviembre, y este año se ha decidido adelantar aproximadamente tres semanas, es decir, al 14 de octubre, una decisión que viene determinada por una decisión «técnica», ha indicado Camacho.
«Si todos los años la gripe es un problema asistencial, este año lo que intentamos es minimizar lo más posible ese problema» ya que va a coincidir con la COVID-19. Además, según ha explicado el director general, es la primera vez que en la región se va a usar de manera más habitual la vacunación con vacuna tetravalente, es decir, que contiene cuatro cepas del virus.
Se han comprado más dosis
Además de disponer de esta vacuna tetravalente, hay una novedad importante en esta campaña en cuanto a volumen. Se han adquirido 420.000 dosis de esta vacuna tetravalente. A estas 420.000 dosis se suman las otras 200.000 dosis de vacunas de distintos tipos que el Gobierno central ha puesto a disposición de la región, «lo que nos permitiría llegar a un volumen total de 620.000 dosis», ha dicho.
La vacuna tetravalente «de alta carga» se va a utilizar para los grupos «más vulnerables dentro de los vulnerables», es decir, a los mayores de 70 años que en este momento se encuentran en residencias de mayores.
Mismos destinatarios preferentes que siempre
Los grupos diana que son el objetivo de esta campaña de vacunación no se han modificado con respecto al año pasado y siguen siendo los mayores de 65 años, los trabajadores sanitarios y sociosanitarios, todas aquellas personas mayores de 6 meses de edad que presenten alguna patología de base, así como los trabajadores de servicios esenciales, como las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, bomberos, Protección Ciudadana, y embarazadas y prematuros.
También se vacunará a aquellos trabajadores que estén en contacto con aves o con cerdos para evitar la aparición de nuevas mutaciones que pudieran ser peligrosas para la salud humana.
De su lado, la directora general de Cuidados y Calidad del Sescam, Begoña Fernández, ha querido transmitir a la población que las vacunas de la gripe «son seguras» y que «las vacunas salvan vidas».
«La gripe puede provocar complicaciones graves»
«La gripe es una enfermedad que la mayoría de las personas pasa levemente, pero este año hay que hacer mucha incidencia en que la gripe provoca complicaciones muy graves en los mayores de 65 años. La gripe mata, la vacuna no», ha sentenciado.
También ha hecho un llamamiento al personal sanitario y al sociosanitario porque es «muy importante» que se vacunen para protegerse ellos mismos y proteger a las personas que atienden.
Ha recordado que el año pasado se consiguió aumentar un 4 por ciento la tasa de vacunación con respecto a la campaña anterior. Este año, el Gobierno de Castilla-La Mancha se ha marcado como objetivo vacunar al menos al 75 por ciento de la población mayor de 65 años y un 60 por ciento en embarazadas y población de riesgo.