El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, se ha visto obligado este viernes a suspender su agenda pública debido a problemas médicos arrastrados desde hace dos meses y por los cuales está recibiendo tratamiento.
Fuentes del Gobierno autonómico apuntan a que estos problemas médicos pasan por «descompensaciones en la tensión», motivo por el cual será sometido a pruebas médicas en próximos días. Según ha podido conocer LA CRÓNICA en fuentes próximas al presidente, la previsión es que pueda reincorporarse a sus tareas en el Palacio de Fuensalida tras el fin de semana, después de tres días de reposo que se intentará sea lo más completo posible.
Este viernes, García-Page tenía previsto asistir a El Bercial, una pedanía de Alcolea del Tajo, donde se había anunciado que iba a inaugurar la vivienda de mayores ‘Virgen del Campo’ ubicada en Ronda de Azután. En su lugar, el acto ha estado encabezado por la consejera de Bienestar Social, Aurelia Sánchez.
La salud puede con Page
Según ha podido conocer LA CRÓNICA en fuentes próximas al presidente, la previsión es que pueda reincorporarse a sus tareas en el Palacio de Fuensalida tras el fin de semana, después de tres días de reposo que se intentará sea lo más completo posible.
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