Fue en 2017 cuando el SESCAM comenzó a utilizar en el Hospital de Guadalajara un remolque, en el exterior del edificio principal, para realizar pruebas de PET-TAC, esenciales para el diagnóstico del cáncer. Desde entonces, 2.681 personas han pasado por estos equipos itinerantes en la capital alcarreña pero suman 7.200 en toda la región, ya que el procedimiento se ha extendido a las demás capitales de provincia, más Talavera y Alcázar. Sólo Ciudad Real cuenta con servicio de Medicina Nuclear en su Hospital General.
Desde la Consejería de Sanidad se destaca que «estas unidades móviles no sólo han evitado desplazamientos a los pacientes para realizar una prueba que proporciona un diagnóstico certero y preciso, sino que además es valorada con gran satisfacción por parte de los usuarios y de los propios profesionales». Más aún, se considera que «estas unidades móviles son un claro ejemplo de la apuesta por el trabajo en red del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha, ya que las imágenes que se obtienen en esta unidad móvil son interpretadas, leídas e informadas por los especialistas en Medicina Nuclear gracias a la conexión de este servicio a ‘NumisCAM’, un sistema de información desarrollado por el SESCAM que permite la disponibilidad digital de los informes e imágenes validados, con lo que se gana en rapidez y capacidad de respuesta en el diagnóstico».
La Tomografía por Emisión de Positrones (PET) es una exploración no invasiva de diagnóstico por imagen capaz de medir la actividad metabólica del cuerpo humano, que, en combinación con el TC (Tomografía Computarizada), proporciona imágenes que señalan la ubicación anatómica de la actividad metabólica anormal dentro del cuerpo, proporcionando diagnósticos más precisos que si las exploraciones con ambas pruebas se realiza por separado.