La consejera de Fomento de Castilla-La Mancha, Agustina García Elez, ha asegurado que hay que establecer límites a la proliferación de las casas de apuestas, que ya suman 250 establecimientos en la región, por considerar que conlleva uno de los principales problemas de adicción para los jóvenes.
En declaraciones a los medios antes de su participación en las jornadas 'Las apuestas, un problema a la vuelta de la esquina' en la Facultad de Ciencias Sociales de Talavera de la Reina (Toledo), García Élez ha afirmado que el Gobierno regional "está sensible" con respecto al tema de la adicción al juego por parte de jóvenes y menores, y que la modificación de la Ley del Juego que se hizo en 2013 a cargo del anterior Ejecutivo regional, ha provocado unos datos realmente "alarmantes" en cuanto a la proliferación de la casas de apuestas.
En concreto, la consejera se ha referido a la repercusión de la liberación del juego en la región, donde se ha pasado de 50 establecimientos de este tipo a 250, y en la que el Gobierno regional ha trabajado para la modificación de un decreto, en septiembre de 2018, para limitar esta situación e incrementar las inspecciones.
La consejera ha explicado que aunque el juego es legal, "lo que hay que hacer es regularlo" por lo que ha destacado la importancia de las inspecciones que se están llevando a cabo, pues se está comprobando que en algunos establecimientos de juego y apuestas se permite el acceso a menores cuando está prohibido e incluso a ludópatas que no deberían dejar pasar.
Poner una mayor inspección, más personal, se sacaron plazas de inspectores, pero también ha habido una importante regularización para poner límite al número de autorizaciones anuales en Castilla-La Mancha", ha señalado.
Al respecto, ha querido poner en valor el compromiso del presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, con este problema que se puede materializar la próxima legislatura con una nueva Ley del Juego en la región, y establecer una serie de criterios "lógicos" como que una casa de apuestas no pueda estar enfrente de un centro educativo y que tenga que existir una distancia regulada.
"Hay que regularizar y, sobre todo, establecer límites a un problema que está aquí y hay que ayudar a los jóvenes que tienen esos problemas pues es una adicción como las drogas", ha indicado.
García Élez también ha defendido que hay que proporcionar otras alternativas de ocio a los jóvenes para que no recurran a este tipo de establecimiento.
PROLIFERACIÓN EN BARRIOS
Por ello, ha puesto de manifiesto su apoyo a estas jornadas que se han desarrollado en la Facultad de Ciencias Sociales, impulsada por un estudiante de Trabajo Social y miembro de Estudiantes en Movimiento, Roberto Sierra, y la asociación Alganda Servicios Sociales.
Estas jornadas se han hecho eco de la problemática social con respecto a la proliferación de las casas de apuestas en los barrios de las ciudades, así como las casas de apuestas online y la banalización del juego entre los jóvenes.
En este sentido, Sierra ha lamentado que las casas de apuestas se hayan convertido en lugares de "quedadas" entre los jóvenes, y que aunque todos los usuarios no son potencialmente ludópatas, "es el sector de la sociedad más vulnerable".
"El perfil se ha rejuvenecido, no es el típico hombre de 60 años que se deja la pensión en las tragaperras, sino que ahora afecta a casas de apuestas muy vinculadas al deporte", ha señalado. Sierra ha insistido en que también pueden tener acceso en todo momento a las apuestas desde el móvil, por lo que se ha roto "otra barrera".
Por su parte, Gabriel Ángel Cano, de la asociación Alganda, ha hablado de la presentación de un 'Riesgometro' en las apuestas, donde viene representado el grado de exposición o de adicción que se puede tener con respecto a las mismas.