Cachorros con sarna, cadáveres de perros abandonados, perros potencialmente peligrosos sin censar o animales conviviendo en el interior de un vehículo con su dueño forman parte de la particular «galería de los horrores» que los agentes del Seprona de Guadalajara se han encontrado en los primeros meses de 2023 en su labor de control en la provincia.
Sólo en lo que va de año suman ya 114 las infracciones relacionadas con la sanidad animal y los animales domésticos. Las actuaciones van desde la investigación de diferentes delitos de maltrato animal a la denuncia de conductas relacionadas con la incorrecta identificación de los animales, la falta de vacunas y desparasitación o las deficientes condiciones higiénico sanitarias de las instalaciones donde se encontraban los animales.
Como relatan desde la Comandancia de Guadalajara, hace unos días, una persona era denunciada en la localidad de El Casar por no gestionar adecuadamente el cadáver de un perro y no realizar la notificación al veterinario; los restos del animal habían sido arrojados al lado de un camino muy transitado, donde ya se encontraba en estado de descomposición cuando los agentes lo hallaron.
De la misma manera, en la localidad de Pioz una persona convivía en el interior de un vehículo con dos gatos y dos perros sin respetar ningún tipo de medida higiénico sanitaria. También en Pioz, varios perros potencialmente peligrosos se encontraban sin censar, sin cartilla sanitaria y su propietario no disponía de licencia ni seguro obligatorio, como estipula la legislación vigente.
Asimismo, meses antes «se recuperaba un cachorro en terribles condiciones, absolutamente afectado de sarna y parásitos» en una explotación agraria de la localidad de Málaga del Fresno.
Ley de Bienestar animal y modificación del Código Penal
Con la modificación del Código Penal se han incorporado al delito de maltrato animal nuevas agravantes que permiten la imposición de penas más graves y que permiten adoptar, asimismo, medidas como el cambio sobre la titularidad y cuidado del animal.
Por su parte, la nueva Ley de Bienestar Animal, incorpora una serie de infracciones en materia de protección y derechos de animales, con sanciones máximas que van hasta los 10.000 euros por infracciones leves, 50.000 euros por infracciones graves o hasta los 200.000 euros por infracciones muy graves.