El Teatro Buero Vallejo de Guadalajara ha programado para el próximo 5 de marzo, a las 20.00 horas, el concierto ‘Somos Mujeres’ en el que, con carácter gratuito, se rendirá homenaje a la primera mujer en viajar al espacio, Valentina Tereshkova. La cita forma parte de los actos organizados por el Ayuntamiento de la capital alcarreña para celebrar el 8 de Marzo.
El concierto, a cargo de la Orquesta Ciudad de Guadalajara, dirigida por Elisa Gómez, está inspirado en la vida de la primera mujer en viajar al espacio.
La cosmonauta tiene en la actualidad 84 años, con lo cual ha sobrevivido ampliamente a la caída de la Unión Soviética. Su nombre en clave durante la misión fue Chaika, que significa “gaviota”.
En realidad, fue la primera civil, hombre o mujer, en viajar al espacio, ya que su adscripción inicial a la Fuerza Aérea Soviética fue meramente circunstancial, para que pudiera participar en el programa espacial. Tereshkova salió de la atmósfera una nave Vostok 6, lanzada el 16 de junio de 1963. Durante las 70 horas de vuelo dio 48 vuelas a la Tierra. Pasaron 19 años hasta que otra soviética viajara al espacio.
Previamente a su ingreso como cosmonauta, en 1961 ya había ocupado el puesto de secretaria del Komsomol (Unión de Jóvenes Comunistas) y luego se adhirió al Partido Comunista de la Unión Soviética, único legal en su país durante siete décadas. Su padre era oficialmente considerado «héroe de guerra», al morir en un tanque durante la campaña contra Finlandia, en los prolegómenos de la II Guerra Mundial.
Para ser cosmonauta, fue elegida entre más de 400 candidatas. Se exigía que fueran paracaidistas menores de 30 años de edad, que midieran menos de 1,70 y que no alcanzaran los 70 kilos de peso.
Personaje muy popular también en la Rusia actual, siempre ha mantenido una buena relación con Vladimir Putin.
Sara Simón glosa la relevancia feminista de la cosmonauta
El espectáculo del Teatro Buero Vallejo constará de una introducción audiovisual, centrada en la vida de Tereshkova. Desde el Ayuntamiento de Guadalajara se destaca que antes de convertirse en astronauta fue una obrera que trabajaba en una fábrica textil y paracaidista aficionada, «dando visibilidad a una gran mujer cuya hazaña supuso un importantísimo avance y un logro para el movimiento feminista», en palabras de la segunda teniente de alcalde y concejala de Igualdad, Sara Simón.