La central nuclear de Trillo ha cerrado el año 2019 con un incremento en la producción eléctrica superior al 2,2 por ciento con respecto al 2018, alcanzando una producción de energía bruta acumulada desde que se inició su actividad el 23 de mayo de 1988 de 255.000 MWH y de 8.458 GWh el año pasado.
El dato ha sido facilitado por el director de la planta, Javier Vallejo, quien ha calificado el año 2019 de «muy bueno y libre de incidentes», un ejercicio en el que en el segundo semestre la producción de energía eléctrica bruta generada en Trillo ha sido de 4.635 GWh y de 8.456 GWh en todo el año.
Según Vallejo, a lo largo del segundo semestre de 2019 la planta ha operado de manera estable a excepción de la bajada de carga del día 21 de diciembre por indicación del despacho de cargas, que obligó a bajar la potencia.
Durante su comparecencia, el responsable de la planta ha recordado que Trillo lleva doce años consecutivos sin paradas automáticas del reactor y más de seis sin tener una parada no programada, la última fue en diciembre de 2013.
La próxima recarga, en mayo
En cuanto a la próxima recarga de combustible de la instalación nuclear, Vallejo ha señalado que ya está planificada entre el 9 de mayo y el 5 de junio, con una duración prevista de 27 días, en la que participarán más de 40 empresas y más de mil profesionales.
Durante este periodo se realizará la renovación de 36 elementos combustibles, se revisarán equipos y componentes y se inspeccionarán las corrientes inducidas en el cien por cien de los tubos de un generador de vapor.
También se procederá a la limpieza e inspección de la piscina y se implantará modificaciones de diseño destinadas a finalizar los programas de trabajo iniciados en años anteriores con el fin de adecuar las instalaciones a los nuevos requisitos industriales o mejorar la disponibilidad de la instalación.
El volumen de actividades programado en esta trigésimo segunda recarga no presenta grandes diferencias con respecto a lo que se considera una recarga estándar de la planta según su director.
Por lo que se refiere a la seguridad nuclear o protección radiológica, la operación de la planta se ha desarrollado con «absoluta normalidad» sin que se haya producido en este periodo ningún incidente significativo que haya afectado a dicha seguridad.
La dosis máxima individual recibida por un trabajador el pasado año ha sido una de las más bajas, situándose en la menor de todas las centrales de España, según Vallejo.
En cuanto a la gestión de residuos, a 31 de diciembre de 2019, el Almacén Temporal Individualizado (ATI) de la planta contiene 34 contendores. En este periodo no se ha cargado ningún contenedor, almacenando en la actualidad los que hay, 327,9 toneladas de uranio.
Dos contenedores más en 2020
La previsión para 2020 pasa por cargar dos contenedores justo después de la recarga de combustible, asegurando el director que todavía resta mucha capacidad de almacenamiento para los residuos de la planta.
La central de Trillo cuenta en la actualidad con 342 trabajadores en plantilla y 800 más de empresas colaboradoras, un número que, en todo caso, es variable; el 20 por ciento de su personal son titulados superiores.
El director ha concluido su intervención resaltando el funcionamiento de la planta de forma estable y segura, así como sin incidentes, además del hecho de que sea el segundo año de dosis más baja en el funcionamiento de la instalación.