Después del verano los días son distintos. Vais a clase, las mañanas están ocupadas, tenéis actividades también por la tarde. Los fines de semana descansáis, salís con vuestros padres, visitáis a los abuelos, hacéis deporte, leéis cuentos, veis dibujos animados y series de aventuras.
Y vais a catequesis. Es bonito conocer a otros niños de vuestra edad. Os preparáis para celebrar la Primera Comunión. Os dicen muchas cosas sobre Jesús, la Virgen María, los santos, la Iglesia.
Jesús también tenía amigos. Hablaba con ellos, les enseñaba, subían a las barcas, iban por los pueblos, participaban en fiestas, comían juntos, rezaban juntos. Y Jesús curaba a personas que estaban enfermas, consolaba a los tristes, ayudaba a todos, especialmente a los que más sufrían.
Seguramente, ya os habrán leído algunas páginas del evangelio, que es la buena noticia que Jesús trae para todos. Jesús enseña con escenas de cada día: las semillas, los campos, las flores, los pájaros, el tesoro, la perla. Y habla de las personas: los padres, los hijos, los pobres. Es fácil de entender lo que dice y es fácil recordar lo que nos pide: que nos queramos todos, que nos ayudemos, que recemos, que estemos alegres por ser sus amigos.
Podéis ver que, junto con vuestra familia, hay otra familia más grande: los amigos de Jesús. Es la Iglesia, con mayúscula. La formamos todos los que oímos las palabras que Jesús dice, rezamos, nos reunimos juntos cada domingo, celebramos fiestas (bautizos, comuniones, bodas, y otras muchas más) y ayudamos a los pobres.
Os enseñarán a tener confianza en Jesús, a darle gracias, a pedirle por vuestros abuelos, padres, hermanos y demás familiares. Aprenderéis mucho sobre la vida de la Iglesia y los sacramentos. Vuestros catequistas responderán a vuestras preguntas. También os dirán que hay que vivir con todos como hermanos. Os ayudarán a perdonar, a no pegar ni insultar a nadie. Os repetirán que hay que escuchar a los mayores. Y cantaréis juntos con mucha alegría.
El día de vuestro bautismo, vuestros padres y padrinos os trajeron con mucha ilusión a la parroquia. Fue un día muy alegre y lleno de luz.
El Papa Francisco nos dice que no podemos ser felices solos. Los otros nos ayudan a dar gracias por lo que recibimos y a compartir lo que tenemos. Todos necesitamos ayuda y amor.
A los niños os gusta la actividad, el movimiento. Os aburrís cuando no sabéis qué hacer. En la catequesis siempre sois activos. Escribís, pintáis con colores, aprendéis a estar en silencio y a hablar con educación, sin gritar. Cuidáis el catecismo y hacéis fichas en el cuaderno de actividades.
Jesús es vuestro amigo.
Un saludo para todos.