No será por falta de información, si eres lector de LA CRÓNICA. Ahora que está a punto de acabar el verano, volvemos a Normandía para recomendarte esta región francesa como destino para un viaje, incluso de fin de semana, que te puede aportar descanso y muchas más satisfacciones.
Ya te lo dijo, con su acreditado estilo, Jesús Orea en un todavía reciente reportaje. Recupera lo dicho entonces y añade lo que reseñamos ahora para tener todavía más pistas y argumentos en tu próxima escapada a Normandía. Porque, estamos convencidos, va a ser próxima.
Mucho calor humano y menos calor en los termómetros es lo que puedes encontrarte por aquí. El dúo Caen-Trouville brinda una escapada junto al mar, a menos de 2 horas de París, en Normandía.
La capital normanda, Caen, desempeñó un papel crucial en la Segunda Guerra Mundial y ofrece numerosos lugares históricos para visitar, como el Memorial de Caen y las playas del desembarco. Por su parte, Trouville-sur-Mer deslumbra con su encanto de la Belle Époque y un auténtico puerto pesquero. ¡Una combinación perfecta para pasar el fin de semana… o incluso más tiempo!
Trouville-sur-Mer: ¡un mundo de promesas!
Trouville-sur-Mer ofrece mil y una aventuras por descubrir y para relajarse a la sombra de los manzanos o con los pies en la arena.
Situado a tan solo dos horas de París, Trouville-sur-Mer debe su reputación al encanto de su puerto pesquero, a la belleza de su larga playa de arena, a la riqueza de su patrimonio arquitectónico costero que data del siglo XIX y a los elogios recibidos por parte de artistas desde 1825.
Desde figuras como Charles Mozin hasta Marguerite Duras, pintores, escritores y actores han disfrutado paseando por el paseo marítimo bordeado de villas excepcionales y respirando el aire vigorizante y yodado del mar.
Nos encanta Trouville-sur-Mer por su autenticidad, su ambiente familiar y acogedor, su encanto, la calidad de sus paisajes y su gastronomía. No te pierdas la histórica lonja de pescado y marisco, en pleno centro de la ciudad, donde podrás degustar pescado y marisco local al paso, ¡un lugar perfecto para un gran aperitivo! Otros imprescindibles a visitar: el antiguo Hôtel des Roches Noires, el museo de Villa Montebello, las Cures Marines, el imponente Casino y las pintorescas casitas de pescadores que bordean las callejuelas escondidas…
Ya sea disfrutando de deportes náuticos o simplemente relajándose, en familia o con amigos, Trouville-sur-Mer ofrece una amplia gama de placeres en un entorno auténtico.
Caen La Mer: un destino en el corazón de Normandía
Caen la mer, la capital de Normandía, es un compendio de mil años de historia. Con su litoral con arquitectura típica y extensas playas de arena, turismo de memoria vinculado a la Segunda Guerra Mundial, naturaleza para explorar y gastronomía para saborear. ¿Estás listo para descubrir todo lo que Caen La Mer tiene para ofrecer?
Situada en el corazón de Normandía, entre Ruán y el Mont Saint Michel y a 2 horas de París, Caen La Mer combina el turismo urbano en una ciudad con un rico patrimonio arquitectónico e histórico con el turismo balneario gracias a su proximidad al mar, a sólo 15 kilómetros. La ciudad y el mar están unidos por un canal y un antiguo camino de sirga. El campo también se despliega a las puertas de la ciudad, invitando a unos días de descanso en un entorno verde, perfecto para practicar el ciclismo y el senderismo.
80° aniversario del Desembarco – Día D
Por último, el destino de Caen la mer está ligado para siempre por el Desembarco de Normandía, cuyo 80 aniversario celebramos este año, y simbolizado por el Memorial de Caen, el mayor museo dedicado a la historia del siglo XX y, en particular, a la Batalla de Normandía. Las playas de Caen la Mer se encuentran en el sector de Sword Beach (una de las 5 famosas playas del Día D). Fue en Sword Beach, en Caen la mer, donde desembarcaron británicos y franceses el 6 de junio de 1944.
En Caen la mer, podrás pasear por la ciudad, disfrutar del ambiente nocturno, viajar en el tiempo (desde los vikingos hasta nuestros días), descubrir la gastronomía local, acercarte al mar o recorrer la costa en bicicleta, dejarte mimar y recargar pilas, divertirte en familia o con amigos, practicar deportes náuticos y disfrutar de un entorno preservado en el corazón de una región rica en paisajes.
