La autovía A-2 a su paso por Guadalajara, en sentido Madrid, ha quedado abierta al tráfico a las seis y media de la mañana de este miércoles. Ha estado más de ocho horas cortada, exactamente desde las 21.50, a causa del incendio de un camión que transportaba pacas de paja y que obligó a cortarla, como bien saben los lectores de LA CRÓNICA, que han estado informados de lo que ocurría desde el primer momento.
Según han informado fuentes del Servicio de Atención y Coordinación de Urgencias y Emergencias 112 de Castilla-La Mancha ha sido a las 6.30 de este 9 de agosto cuando se ha retirado el vehículo afectado y cuando se ha reabierto la vía, cortada a la altura del kilómetro 51. Han sido horas de intenso trabajo para los bomberos y para los operarios del mantenimiento de la autovía, entre otros efectivos.
LA CRÓNICA ha sido testigo directo de un espectacular siniestro en la A-2 a la altura de Los Faroles, en Guadalajara.
A las 22.05, lo que era un enorme columna de fuego se había convertido ya en una densa masa de humo, en el arcén de la A-2.
Todo se ha desarrollado en pocos minutos.
A las 21.35, un trailer cargado de pacas de paja bajaba hacia Los Faroles, por la A-2, en Guadalajara.
Los conductores, incluido este redactor y, sobre todo los de los camiones, intentaban advertir con las luces al conductor del camión de las chispas que se apreciaba que estaban quemando ya la paja a la altura del tren trasero, por su parte derecha.
A partir de ahí, el transportista solo ha tenido tiempo de orillarse a la altura del kilómetro 51, casi en el nudo de acceso a la N-320.
El camión ha comenzado a arder de un modo pavoroso.
Diez minutos más tarde, una patrulla de la Policía Local ha llegado al lugar, por la propia autovía y ha cortado el tráfico… justo en el momento en que se oía una fuerte explosión, quizá atribuible a algún neumático.
La llegada de los bomberos, desde Guadalajara y desde Azuqueca, ha comenzado a reconducir la situación casi a las diez de la noche.
A las diez y cuarto, los carriles en dirección Madrid seguían bloqueados con el consiguiente monumental atasco, pese a que el tráfico se desviaba por la vía de servicio.
Al amanecer del miércoles, la zona había sido despejada y ya nada recordaba lo ocurrido, más allá de lo que ilustra esta información.
Como se puede apreciar en los siguientes vídeos, tomados en su mayoría en los casi diez minutos entre el siniestro y el momento en que quedó cortada la autovía, los conductores seguían su camino en dirección a la capital de España, atónitos y a marcha lenta, mientras el camión ardía y era difícil aventurar cómo podía llegar a afectar el incendio al propio entorno.
Ampliaremos la información según se vayan conociendo más detalles de las labores de extinción y rescate.
LA CRÓNICA ha informado en directo de este suceso por sus redes sociales.