Eva Sigüenza, «Eva Ryjlen» en el mundo artístico, llegaba a la Casa de la Cultura de Cabanillas para ofrecer en directo su segundo disco en solitario, aún inacabado. Verá la luz la próxima primavera. Lo del sábado, 2 de enero de 2021, lo disfrutaron unos pocos: los que pudieron conseguir alguna de las contadísimas entradas para esta comparecencia, dos conciertos limitados en aforo por el canalla habitual de nuestras desdichas, llamado COVID-19.
Ryjlen se presentó con una cuidada banda: la guitarrista Laura Solla, el bajista Rodrigo Garcia, el batería Carlos Pinto y la teclista Ruth Pinel. Además, la banda se acompañó para este estreno de un coro de tres voces femeninas.
Las letras de este segundo trabajo son aún más poéticas que las de su primer disco («Violencia Posmoderna»), y hablan de sentimientos, de piel, de afectos, de sueños o de frustraciones, todo ello con gran lirismo. Son temas como «Caminar», que abrió la actuación, «Caer», «La fiera», «Gotas» o la punkérrima «Santuario», que la banda alternó con canciones del primer disco de Ryjlen («como Santa fe» o «Violencia posmoderna»).
Dos pases, dos torrentes de música en Cabanillas del Campo.
