La Diputación de Guadalajara ha cumplido un año más la tradición de rendir homenaje a sus trabajadores con motivo de la fiesta de los Sagrados Corazones.
El presidente, José Luis Vega, ha entregado placas de reconocimiento a los 21 funcionarios, y funcionarias, de la Diputación que han llegado a su jubilación durante los últimos doce meses y un obsequio conmemorativo a otros siete trabajadores que han cumplido 25 años de servicio público en la Institución Provincial.
En una ceremonia que, por segundo año consecutivo, ha tenido un aforo restringido a causa de las medidas de prudencia que todavía deben mantenerse para luchar contra la pandemia, Vega ha agradecido “el esfuerzo y dedicación de los trabajadores y trabajadoras que mantenéis en funcionamiento la Diputación todos los días del año, prestando todos los servicios que deben prestarse incluso en momentos tan difíciles como los que hemos vivido por la pandemia, y sacando adelante una gran cantidad de iniciativas novedosas que están haciendo a esta Institución cada día más útil para los municipios de nuestra provincia”.
El presidente ha destacado «el clima de diálogo e interlocución» entre la actual dirección política de la Diputación y su plantilla de empleados públicos, que ha permitido alcanzar varios acuerdos importantes en materia de recursos humanos y derechos laborales, así como la aprobación del Plan de Ordenación del Empleo Público para “adaptar los servicios y la estructura de la plantilla a las necesidades actuales, que han cambiado con los años”.
José Luis Vega ha animado a los empleados y empleadas de la Diputación a “mirar con optimismo el futuro y seguir trabajando para que esta Institución sea cada día más útil para los ayuntamientos y gentes de la provincia” y ha deseado a los funcionarios jubilados que “disfruten del merecido descanso y de su nueva etapa vital”.
El presidente ha dedicado también palabras de recuerdo a trabajadores y representantes políticos de la Diputación recientemente fallecidos, en referencia a José Pareja y Felipe López, y de solidaridad y especial reconocimiento a los funcionarios que “han perdido a seres queridos en situaciones durísimas y han seguido al pie del cañón, poniendo todo su esfuerzo al servicio de la Institución y de la ciudadanía”.