Tras las obras de rehabilitación y reforma llevadas a cabo por sus actuales propietarios, hay quien considera que el castillo de Galve de Sorbe está recuperando su antiguo esplendor. Tanto es así, que la asociación Hispania Nostra ha decidido sacarlo de su "Lista Roja del Patrimonio", donde acaba de entrar el Alcázar Real de Guadalajara y donde se mantienen numerosos monumentos de la provincia.
En agosto de 2018 comenzaron los trabajos de consolidación del castillo, en una primera fase de desescombro, limpieza y demolición de elementos puntuales no protegidos. Se han retirado los materiales de fibrocemento y uralita utilizados en la restauración de los años 70, así como la cubierta de esa época, dejando al descubierto la construcción original y las marcas de cantero encontradas en los sillares. Actualmente continúan las obras.
En 1971 el castillo pasó a propiedad del Estado y éste se deshizo de él mediante subasta pública en 1972, adjudicado por 1.400.000 pesetas a su anterior dueño.