Los dueños de mascotas que no limpien sus deposiciones en la calle serán multados en Guadalajara, desde finales de año o principios del siguiente, hasta con 3.000 euros frente a los 250 euros de multa que se paga actualmente, al ser considerada esta infracción en la nueva ordenanza como sanción muy grave, en vez de sanción leve.
La modificación de la ordenanza municipal de tenencia de animales irá este viernes a pleno para su aprobación. Luego se publicará en el Boletín Oficial de la Provincia la próxima semana. Tras estar expuesta treinta días hábiles, la previsión es que entre en vigor para finales de diciembre, y si las hubiese, su vigencia arrancaría previsiblemente para el próximo año, con la nueva publicación de la norma en el BOP.
Las sanciones «leves», de 750 euros
El régimen sancionador de la nueva ordenanza es uno de los cambios fundamentales con multas de hasta 750 euros, 1.500 y 3.000 euros en función de que se trate de una sanción leve, grave o muy grave mientras que en la ordenanza anterior las sanciones eran de hasta 250, 500 y 1.500 euros en función de su gravedad.
Además de tipificarse como infracciones muy graves al margen de las relacionadas con la no recogida de excrementos caninos en la vía pública, no limpiar los orines con una mezcla de agua con vinagre o productos desinfectantes, la alimentación de gatos, palomas u otros animales por personas no autorizadas para ello y provocar ataques por parte de los animales a personas y colocar trampas sin autorización. Las sanciones aparejadas irán de entre 1.500 euros a 3.000 euros.
Se considerará infracción grave con multas de entre 751 euros hasta los 1.500 euros, la permanencia del animal durante más de una hora en el interior del vehículo, portar documentación falsa, permitir que el animal beba directamente en una fuente de agua potable o el abandono de animales muertos.
Así, llevar suelto al animal en la calle, no portar bolsas para recoger las deposiciones caninas o no disponer de una botella de agua con mezcla de sustancia higienizante para limpiar los orines, al igual que bañar al animal en fuentes ornamentales o estanques será considerado como una infracción leve con una multa de hasta 750 euros.
Prometen «firmeza» desde el Ayuntamiento
«Vamos a actuar con firmeza frente a los dueños que no recogen los excrementos y no limpian los orines porque no podemos tener una ciudad repleta de excrementos», ha señalado la concejala de Seguridad, Pilar Sánchez, en una rueda de prensa en la que ha comparecido junto a la concejala de Medio Ambiente, María Ángeles García.
Unas comparecencia en la que Sánchez ha avanzado también que tanto la Policía Local como el Ayuntamiento, a través de los medios de comunicación, comenzará a informar a los dueños de las mascotas sobre esta nueva ordenanza, mientras se tramita la aprobación definitiva de esta ordenanza, que se prevé a finales de diciembre o primeros del próximo año, siempre que no haya alegaciones.
Así, cuando concluya este periodo de información se comenzará a sancionar.
Al margen, el Ayuntamiento va a emprender también una campaña de concienciación e informativa que llegará a todos los hogares de la ciudad porque, aunque «la mayoría» de los propietarios de mascotas «cumplen» con las obligaciones, Sánchez ha subrayado como, en los últimos meses, se ha incrementado de manera considerable la presencia de excrementos caninos en aceras y vías públicas. «Esto no puede seguir así», ha apostillado.
Por ello, el Consistorio repartirá 10.000 lotes con dispensadores de bolsas para la recogida de excrementos y un recipiente para limpiar con líquido los orines de los animales, y se informará de forma presencia en los lugares habilitados para los perros.
Cuidado con alimentar los gatos sin permisos
Por vez primera, la ordenanza también contemplará el protocolo conocido como CES, de Captura, Esterilización y Suelta para el control de las colonias de gatos y habrá multas para personas que sin tener carné de alimentador, alimenten a los gatos, sanciones que pueden llegar hasta también 3.000 euros, al igual que para quien alimente a las palomas en los parques porque esto también genera suciedad y malos olores.
En este sentido, la edil delegada de Seguridad Ciudadana ha incidido que no se trata de un problema estético solo sino de higiene y salubridad. «A todos nos gusta tener una ciudad limpia y entre todos debemos cumplir este objetivo», ha subrayado tras insistir en que la finalizada de las sanciones no es la recaudación sino la de perseguir a los infractores.
De su lado, la concejala de Medio Ambiente, María Ángeles García, ha reiterado que la intención del Gobierno Municipal es actuar frente a las colonias de gatos incontrolados y frente a los problemas de salubridad por alimentarlos en la calle.
Para ello, aunque se suelten los gatos cuando se les esterilice, se les marcará y se llevará un control de los mismos y también habrá un control de las propias colonias para que no se incremente el número de felinos en ellas.
En cuanto al protocolo CES, la edil también ha avanzado que habrá una campaña de sensibilización y de fomento de las adopciones. «Queremos que haya convivencia entre personas y animales», ha subrayado tras reconocer la llegada al Ayuntamiento de quejas porque hay personas que echan comida a los animales, y esto ya no se podrá hacer si no se está autorizado y, en todo caso, será siempre comida seca.
También se quiere controlar la ubicación de colonias, y se va a hacer especial hincapié retirar a sitios discretos aquellas que estén en zonas inmediatas a centros educativos, sanitarios y sociosanitarios, algo que ya figura en el protocolo.
Con esta nueva ordenanza Guadalajara se adecuará a las ordenanzas que ya rigen en otras ciudades de las mismas características que la capital.