Según puede avanzar LA CRÓNICA, en la madrugada de este miércoles ha fallecido Francisco Tomey Gómez. El óbito se ha producido en su domicilio de Guadalajara, consecuencia de un infarto.
A sus 78 años, mantenía sin ningún menoscabo la lucidez que siempre le caracterizó, algo que acreditaba ante cualquiera de sus muchos conocidos, tras una trayectoria política que le convirtió durante dos décadas en forjador de buena parte de la Guadalajara que aún conocemos.
Desde la presidencia de la Diputación Provincial, entre 1983 y 1999, consolidó el poder territorial del Partido Popular en una dimensión que no se ha repetido. Eran los tiempos en que la política se hacía a golpe de teléfono desde un despacho de la casa-palacio de la Plaza de Moreno o a pie de calle y de plaza de pueblo, indistintamente.
En aquellos años previos a la telefonía móvil y tan lejanos aún del auge de las redes sociales, pudo y supo mantener una entente con la otra figura política de aquellos años, el socialista Javier de Irízar, que ocupaba la Alcaldía de la capital. Entre ambos muñeron acuerdos y entendimientos bien diferentes a los radicales enfrentamientos que hoy son habituales.
En aquel PP sucesor de AP, si a Manuel Fraga se le asociaba con la red de paradores que instauró, a Paco Tomey se le identificó durante mucho tiempo con su empeño de que ningún pueblo de Guadalajara careciera de un frontón, a cargo de la corporación provincial. Lo logró, como otros objetivos de más enjundia en los ya muy lejanos tiempos del canon energético, esa fuente de ingresos institucionales que pasó a peor vida. La presencia de la Diputación en la ciudad de Guadalajara (polideportivo San José, Centro San José, escuelas, conservatorio…) fue otra prueba, una más, de su astucia política, con su punto de osadía.
Además de la extensa e intensa labor en la Diputación, aún hay quienes recuerdan la desarrollada como senador haciendo tándem con José María Bris, quien también sería alcalde de Guadalajara.
La capilla ardiente con los restos mortales de Francisco Tomey Gómez será instalada a partir del mediodía del miércoles en el Tanatorio Ronda Norte.
La misa funeral en la concatedral de Santa María se oficiará en la mañana del jueves.