El Ayuntamiento de Guadalajara está a punto de dar por concluido el denominado Plan Integral de Limpieza, después de 215 días de trabajo, que se han ido relatando puntualmente desde los servicios de prensa municipales según se iban desarrollando, barrio a barrio.
Ahora, en pleno mes de agosto, ha sido la propia alcaldesa, Ana Guarinos, la que ha asumido el protagonismo del balance, sin esperar a la conclusión real de esa programación. «Guadalajara es ahora es una ciudad mucho más limpia. Ese ha sido y seguirá siendo nuestro objetivo y nuestra prioridad», ha sentenciado este martes ante los periodistas.
El cálculo oficial habla de 2.400 horas entre los distintos servicios, en todos los barrios de la ciudad, más Usanos, Iriépal, Taracena y Valdenoches así como en los polígonos industriales.
¿Qué es exactamente lo que se ha hecho?
Se comenzó el plan en el barrio de la Llanilla, siguiendo luego por El Balconcillo y Escritores. En 2024 se continuó por la zona de Aguas Vivas; casco histórico; el Alamín, con Usanos y Valdenoches; seguido de Manantiales, La Chopera, Río Henares y barrio de la Estación. Hasta hace dos semanas los servicios han estado trabajando en la Concordia y Adoratrices, llegando también a Iriépal y Taracena.
El Plan, según detallan desde el Ayuntamiento, ha contemplado la limpieza intensiva de todos los viales de la ciudad, con barrido y baldeo mixto, además de desbroce, «llegando a la práctica totalidad de las calles y sumando un número de kilómetros incalculable» que, en consecuencia, no facilitan.
En obras y reparaciones se ha realizado el relleno con caucho de 160 alcorques, reposición de baldosas, repaso de pasos de cebra, arreglo de barandillas, creación o reparación de escaleras de acceso, ampliación de alguna acera y reposición de bancos.
«Algunas obras han sido pequeñas reparaciones y otras con mucha más enjundia, como la ampliación de la acera en Layna Serrano o la sustitución de barandillas y quitamiedos en Julián Besteiro», apostillaba este martes la alcaldesa.
Respecto a los trabajos en la red de saneamiento, aparte de atender el mantenimiento correctivo y necesidades como atascos en la misma, se han limpiado de más de 5.000 imbornales y alcantarillas, de los aproximadamente 7.300 que tiene la ciudad.
También se ha actuado sobre 8.166 puntos de luz, limpiando las luminarias, retirando pegatinas de los báculos y repintado de soportes cuando era necesario además de verificación mecánica y eléctrica con sustitución de tapas, cableado, etc.
En zonas ajardinadas se han limpiado más de 176 hectáreas de zonas verdes, lo que supone un 80% del total, con plantaciones de 5. 630 plantas (195 árboles y 5.435 arbustos) en toda la ciudad. Limpieza de alcorques viarios, 4.250, un 60% del total.
En mantenimiento y reparación de papeleras, se han realizado más de 250 actuaciones, con 100 papeleras en nuevas ubicaciones, 80 sustituidas y 70 reposiciones.
Parecido ha ocurrido con los contenedores, donde se han realizado más de 300 actuaciones, con 230 reparaciones, 40 sustituidos y 30 en nuevas ubicaciones.
También se han eliminado más de 1.000 grafitis en cierres metálicos, un total de 8.000 pequeños grafitis retirados, 1.500 grandes grandes, y más de 10.000 metros cuadrados de eliminación de grafitis en fachadas. Así mismo, se han realizado 7 murales decorativos, en el túnel de Aguas Vivas, Fuente La Niña, Parque de Adoratrices y Calle Dinamarca.
«El trabajo que iniciamos el 4 de octubre de 2023 concluye ahora aunque en realidad no acaba nada, porque esto es un punto y seguido que retomaremos tras las Ferias y Fiestas de Guadalajara del mes de septiembre donde, como bien saben, todos los servicios, incluida la limpieza, ya tienen trabajo extra para atender todos los actos festivos», ha insistido Guarinos, para acto seguido destacar que el Plan Integral de Limpieza «no ha tenido ningún coste añadido para los ciudadanos ni el Ayuntamiento de Guadalajara, pues lo que se ha hecho es reorganizar y coordinar todos los servicios municipales, tanto los que se prestan con personal directo del Ayuntamiento, como los contratados, para lograr una mayor eficacia».
Ana Guarinos ha destacado que estos zafarranchos de limpieza y reparaciones «no se habían hecho nunca en el mandato anterior».