Con discreción, el parking del número 8 de la calle Alvarfáñez de Minaya ha vuelto a abrir sus puertas. Quien lo usara cuando era gratuito y tenía un policía local como guarda en la puerta, lo reconocerá más luminoso y con algunas novedades. Como las barreras… y que ahora es de pago, con gestión privada.
Es una de las alternativas que los actuales responsables municipales han venido esgrimiendo a las críticas por la creciente supresión de plazas de aparcamiento en superficie, que ha comenzado por Miguel Fluiters y que pueden tener continuidad en calles como Cervantes y Plaza de la Antigua, entre otras.
Para evitar despistes en su localización, sobre todo para aquel que llegue desde fuera, hay que indicar que este al que nos referimos es el bautizado en Google como Parking Dávalos Telpark, que nada tiene que ver con la zona verde que aún sobrevive entre el torreón de Alvarfáñez y la Avenida del Ejército, unos metros más abajo.
Los trabajos para su puesta a punta han llevado varios meses. Desde finales de abril se anuncia su puesta en servicio con una gran pancarta en la fachada, que anima a utilizar la app de Telpark, ya conocida por aquellos que desistieron hace tiempo de la laboriosa tarea de usar los postes de la zona azul y sus teclados. Con la aplicación en el teléfono móvil, la barrera se activa sola al reconocer la matrícula. Si no, se puede acceder y pagar luego en la caja automática.
Las tarifas fueron aprobadas en enero de 2022 y se fijaron en 0,025€/min como precio máximo. También existirá la modalidad de abono diario y mensual.
60 plazas en rotación
A simple vista, la reforma de pintura no ha obrado el milagro de ensanchar las plazas, que siguen siendo tan estrechas como siempre lo han sido. Todo está más reluciente, incluidos los dos puntos de carga para vehículos eléctricos, que aún no están operativos pero con los que se cumple la obligación legal, y estatal, contenida en un decreto de 2021.
La gestión de las 60 plazas ahora de nuevo disponibles le corresponde a Telpark, que se hizo con la licitación planteada hace meses por el Ayuntamiento de Guadalajara, en un paquete conjunto con las 208 de rotación en el Ferial, parking donde las plazas en venta siguen a disposición de los inexistentes compradores en su inmensa mayoría.
La empresa tiene 25 años por delante para recuperar la inversión, puesto que las instalaciones no retornarán a la Corporación hasta 2048, salvo desistimiento del concesionario.
Tan discretamente ha comenzado a funcionar este nuevo aparcamiento en el mismo centro de la ciudad que este miércoles, por ejemplo, se encontraba absolutamente vacío a la hora en que las oficinas bancarias y las delegaciones de la Administración llevan hasta esas calles a muchas personas, algunas también en coche y con la no siempre fácil tarea de encontrar un sitio donde aparcar.