Expoastronómica’19, que el viernes abrió sus puertas en el CDM Valdeluz, vio pasar hasta el domingo más de 4.500 visitantes, el triple que en la última edición. No obstante, el alcalde de Yebes, Miguel Cócera, se queda con unas cuantas sensaciones. “Es verdad que hay otras similares en España, pero esta tiene la peculiaridad de conectar como ninguna con el público”, aprecia. Una feria que aúna e integra recursos y contenidos para niños desde los tres años a bachilleres, adolescentes y mayores. A pesar de este satisfactorio balance, el Ayuntamiento de Yebes no saca pecho con las cifras, que solo sirven para la estadística. “Nos quedamos sin duda con el excelente sabor de boca que ha dejado entre los visitantes”, concluye.
Un largo fin de semana que empezó el viernes con una jornada científica escolar que reunió a más de 700 alumnos de Infantil, Primaria, Secundaria y Bachillerato, una de las principales novedades de esta quinta edición. Y que el sábado y domingo recibió a asistentes llegados desde la zona centro y más allá, de Huesca, Valencia, Zaragoza o Toledo. “Como una familia que llevaba cuatro horas de viaje y nos pidió por teléfono que reserváramos un hueco en los talleres para su hija”, desvela el alcalde, que reconoce que en 2014 soñaba con que un proyecto que por aquel entonces era una quimera pudiese despertar algún día el interés del gran público. “Pero ni en nuestras mejores visiones creímos que llegaríamos a tanto”, admite. Entre otras cosas, porque en España no había ningún precedente, así que el Ayuntamiento de Yebes tuvo que fijarse en otros modelos ya consolidados en Europa, Japón y Estados Unidos. “Ese futuro solo pudimos atisbarlo en Youtube”, dice.
El Ayuntamiento de Yebes hace autocrítica de lo vivido en Expoastronómica’19, puesto que considera que hay margen para seguir creciendo. “Es verdad que nos queda mucho por mejorar, pero llevamos cinco años aprendiendo y corrigiendo errores”, valora el alcalde. Porque hubo instantes en el transcurso de la feria en que se solaparon los horarios de actividades, se retrasó la mesa redonda de la Asociación de Federaciones Astronómicas de España y se formaron largas colas en los talleres, proyecciones interactivas, simuladores virtuales o planetarios, para las que habrá que idear algún tipo de mecanismo que evite esas esperas. Unos deslices que para nada empañan el sentir de la mayoría, que confesó a la organización que “hemos dado con la clave del éxito y logrado que todo el mundo se sintiera a gusto”. Cócera afirma que este no es el mensaje de un político, sino “de cien ciudadanos que nos lo han trasladado así, de cinco conferenciantes y quince participantes en mesas redondas”. De gente tan entendida como los directores de recursos acreditados y precursores como los Planetarios de Aragón y Pamplona, “que saben de lo que hablan, de lo que cuesta organizar un evento como este y atraer al público y al alumnado con contenidos didácticos”. Un desafío para un municipio de apenas 4.000 habitantes que supone un “intenso esfuerzo de organización y logístico” y que es asumido en exclusiva “por los concejales y empleados municipales”.
El alcalde de Yebes también tiene palabras de elogio para las cientos de familias al completo que han disfrutado a lo grande de esta feria. “Porque las madres y padres tienen una responsabilidad directa en la educación de sus hijos y es muy gratificante ver cómo se han integrado en las dinámicas del juego y aprendizaje y que sepan reconocer el esfuerzo y el valor de eventos como este”, explica. Por eso, advierte que el Ayuntamiento de Yebes “no va a morir de éxito porque en absoluto hemos tocado techo”. Entre otras cosas, porque todavía hay espacio físico para aumentar la superficie expositiva de Expoastronómica con más contenidos y recursos. Pero Miguel Cócera admite que hay un segmento que no ha creído lo suficiente en esta marca y al que hay que convencer. Que no es otro que el sector profesional especializado, que debe estar representado en esta feria porque tiene “una notable faceta divulgativa que cumplir, esa parte que queda en el centro entre lo que los científicos saben y el público quiere saber”. El edil se refiere a la media docena de empresas españolas que participan en el proyecto Galileo de la Agencia Espacial Europea para el desarrollo de un satélite de comunicaciones. Cuyos logros y aplicaciones tienen traslación en campos como la alimentación, tecnología, seguridad, transporte, farmacia, medicina, etc. “Eso es lo que queremos traer aquí”, dice.
El próximo 26 de mayo hay una cita con las urnas de las que saldrá la nueva Corporación municipal de Yebes, que debe decidir si mantiene Expoastronómica como “el sello de calidad que hoy prestigia a este municipio y que es patrimonio de todos los vecinos”, argumenta el alcalde. Un activo que Yebes y Valdeluz no se pueden permitir el lujo de perder porque ha costado mucho sacar adelante. De ahí que Miguel Cócera apele “al sentido común y la razón” de los futuros gobernantes para que “no den un paso atrás”. Porque la feria Expoastronómica es solo una pieza más del “conjunto de sensibilidades, voluntades y corazones” que conforman una comunidad. “A la competencia que está ahí fuera a la espera le hemos descubierto el camino a seguir y cualquier otro municipio, empresa o entidad puede recoger ese testigo y decidir que si no lo hace Yebes lo harán ellos”, sentencia.