Hacia las cuatro y media de la madrugada del viernes se ha producido una explosión en Guadalajara, que ha destrozado un kebab en la calle Segovia, esquina con la calle Zaragoza. No ha habido heridos aunque sí cuantiosos daños materiales.
Está confirmado que la deflagración se ha producido en el interior del establecimiento, que ocupa una bajo comercial en un edificio de 6 pisos.
Según la primera valoración de los bomberos de Guadalajara, la explosión se habría producido por una acumulación de gas butano o propano. En el interior del establecimiento estaban aparcadas las motocicletas de reparto del negocio.
Las dotaciones desplazadas han extinguido el incendio con la suficiente eficacia y rapidez como para que las llamas no alcanzaran a las viviendas. No se ha podido evitar que un local anejo, dedicado a productos de higiene industrial, se haya visto también parcialmente afectado.
En todo caso, los pisos ubicados encima no han sufrido daños, aunque sus ocupantes fueron desalojados en primera instancia por la Policía Local, a la vista de la intensa humareda originada.
Los vecinos ya han han podido volver a sus hogares. De hecho, según ha podido confirmar LA CRÓNICA, se ha desalojado de madrugada a unas 40 personas, por precaución. Pasada una hora, pudieron volver a casa.
En busca de posibles daños estructurales
Otra cuestión que llevará más tiempo es el análisis en profundidad de lo ocurrido. Según ha confirmado este diario, la Policía Nacional no hará la inspección ocular hasta entrada la mañana de este viernes. También en las próximas horas está previsto que bomberos y técnicos municipales inspeccionen más a fondo el edificio, en busca de daños estructurales, que en principio no son aparentes.
