La Guardia Civil han detenido a tres personas e investiga a una cuarta más como presuntas implicadas en estafas por valor de 420.000 euros por el denominado método del CEO. Las víctimas han sido empresas no sólo de Guadalajara, sino también de Baleares, Barcelona, Tarragona e incluso de otros países.
A los detenidos, todos hombres y de entre 30 y 50 años, se les considera autores de siete delitos de estafa y blanqueo de capitales, revelación de secretos, cuatro de usurpación del estado civil y seis de falsificación de documento público. La Benemérita ha logrado recuperar hasta la fecha 360.000 euros.
En Valencia empezó a descubrirse la trama
La operación se inició a raíz de una denuncia interpuesta por una empresa con sede en la localidad de Alfafar (Valencia), que puso en conocimiento que había sido víctima de una estafa en grado de tentativa, en la que los autores, utilizando su imagen corporativa, habían tratado de inducir al error mediante utilización de herramientas de ingeniería social a una entidad bancaria para que se hicieran pagos a las cuentas controladas por la organización investigada.
En ese momento, el montante total del capital que habían intentado conseguir llegaba a los 220.000 euros, pero se logró bloquear la operación instantes antes de que pudiera completarse.
¿Qué es el «fraude del CEO»?
El método que utilizaron los autores fue el conocido como fraude del CEO, en la modalidad de Bussines Email Compromise (BEC), que consiste en que los autores de los hechos engañan a un empleado con acceso a las finanzas para que realice una transferencia a una cuenta que cree que es de un cliente o proveedor, pero el dinero acaba en la cuenta bancaria de la organización criminal.
Para ello consiguen acceder a la red corporativa y, una vez dentro, examinan durante semanas los sistemas de facturas, las listas de proveedores o clientes de las empresas, llegando a copiar los usos y expresiones que utiliza la persona (CEO) cuyos datos van a utilizar.
Una vez estudiada toda esta información, aprovechan el momento oportuno (momentos de ausencia del gerente o de una importante operación) para suplantar su identidad y enviar un email en el que solicitan una transferencia a una cuenta de un proveedor o cliente que parece legítima, argumentando que el cambio se debe a un problema fiscal con la cuenta habitual o algún pretexto similar.
De esta forma, el receptor del email realiza la transferencia de cientos o miles de euros sin sospechar. Cuando ya tienen los autores el capital en su cuenta, se inicia el proceso de blanqueo de capitales.
Abrieron cuentas sin problemas
Tras realizar todas las gestiones de investigación se pudo verificar que los presuntos autores habían utilizado para la apertura de cuentas bancarias, en diversas entidades, documentos de identidad de extranjeros (NIE) «de gran calidad», de manera que los empleados de las entidades bancarias que no detectaron la falsedad.
Realizado el estudio de las cuentas, se pudo comprobar que habían sido utilizadas para cometer otras estafas a empresas de Baleares, Barcelona, Tarragona y Guadalajara y a otras dirigidas a empresas ubicadas en Malasia. En este último caso, lograron estafar más de 15.000 euros mientras realizaba una transacción de venta de material sanitario a una empresa de Barcelona e Italia.
En este último país se ha podido vincular a los presuntos autores con un hecho en el que a una empresa ubicada en Varese la habían estafado 22.000 euros y que investigaba la Polizia di Stato.
Estos hechos cometidos en el extranjero se pudieron confirmar a través de los mecanismos de cooperación policial internacional –Interpol y Europol–. Los agentes han podido averiguar que los autores habrían tratado de conseguir una cantidad de dinero superior a los 600.000 euros entre empresas españolas y extranjeras.
Un investigado en Gijón; un detenido en Tarragona
Los agentes consiguieron averiguar la verdadera identidad de los presuntos estafadores y en noviembre se saldó con la investigación de uno de los presuntos autores en Gijón y a la detención del segundo en Tarragona.
Entre octubre y noviembre, se procedió a la detención de otros dos más. A uno de ellos se le vincula con seis identidades falsas, con las que se estaba moviendo por España, Francia y Alemania y, además, realizaba la apertura de cuentas bancarias.
De la misma forma, las empresas perjudicadas de España han podido recuperar hasta la fecha un total de 360.000 euros de los 420.000 que pretendían obtener.